Ley Nacional del Teatro - Consideraciones a mitad de camino

Encuentro de Teatristas Independientes Informe noviembre 1997

A los compañeros teatristas: desde que en Semana Santa del ’94 compañeros de todas las provincias se autoconvocaron conformando el ETI, seguimos reuniéndonos y trabajando por las reivindicaciones del sector. Son nuestros principios:
• Conseguir susbsidios para los Grupos de Teatro Independiente.
• Defender las posiciones éticas independientes.
• Exigir a todas las autoridades transparencia en sus gestiones.
• Demandar para que se abran los teatros oficiales a la actividad independiente y se cumplan las legislaciones vigentes y los compromisos contraídos.
• Estar presentes, y no sólo representados donde se toman decisiones.
Por eso hicimos: Un debate sobre cómo sostener la producción independiente. Cortamos la Av. Corrientes, en Capital Federal, frente al Teatro General San Martín haciendo conocer nuestros reclamos en varias oportunidades. Colaboramos en la redacción del Estatuto de la ciudad de Buenos Aires, donde figura un artículo de fomento al teatro independiente. Propusimos la creación de los Registros de Grupos de Teatro Independiente en provincias y municipios. Convocados por la Asociación Argentina de Actores propusimos mejoras en la redacción del nuevo Reglamento Interno de Cooperativas y, como punto fundamental la afiliación al solo aporte.
Desde fines de mayo de este año participamos en las reuniones semanales sobre la reglamentación recientemente aprobada de la Ley de Teatro 24800, junto a Argentores, ATI (Asociación de Teatros Independientes), el MATE, la Asociación Argentina de Actores, AAdeET (Asociación de Empresarios Teatrales) y representantes de distintas provincias, donde nos adherimos a todas las propuestas de los compañeros teatristas del interior y expusimos nuestras posiciones para que se tuvieran en cuenta, no sólo a los grupos de teatro independiente, sino a los estudiantes y sus organizaciones.
También hemos expresado nuestra discrepancia con la insistencia de la Secretaría de Cultura de la Nación y de las Secretarías de Cultura provinciales, por intentar regular en asuntos como designaciones de jurados, propuestas para representantes provinciales, Artículos reglamentarios, etc., dejando de lado sus verdaderas atribuciones como las de facilitar los medios para el desarrollo de la actividad teatral sin discriminación ninguna y total transparencia en las asignaciones del dinero público.
En estos momentos lo que está en discusión es si el gobierno central hará cumplir lo que la ley manda con los fondos destinados para el funcionamiento del recién creado Instituto Nacional del Teatro:
a) que disponga de recursos en el presupuesto nacional
b) que el CONFER y Lotería Nacional depositen lo señalado desde la fecha de promulgación de la ley, marzo de 1997
c) que las autoridades provinciales y municipales intervengan dando y no pidiendo.
Por eso los teatristas debemos estar hoy más juntos que nunca, en núcleos y coordinadoras, acercándonos para expresar nuestras propuestas y críticas abiertamente, en forma personal o grupal. Es posible que esté comenzando una etapa donde, por fin, el Estado no rehuya su obligatoria y necesaria participación a través de lo que manda la Ley 24800 y con la presencia de todos sin exclusiones, sean éstos actores, técnicos, autores, bailarines, coreógrafos, estudiantes, docentes, investigadores, titiriteros, mimos, directores, escenógrafos, público y todas aquellas categorizaciones aún no detalladas pero sí previstas en la letra.
Tal vez las autoridades tengan que darse cuenta que no son dueños ni propietarios, sino administradores con la obligación de rendir cuentas con claridad y transparencia de todos y cada uno de sus actos, sean éstos económicos, sociales, culturales, artísticos o políticos. Y las organizaciones gremiales, políticas no partidarias y culturales, deba abrir sus puertas un poco más seguido para permitir la participación activa, e informar de sus acciones y propósitos, ya que la gente quiere saber cada vez más de qué se trata.
Y tal vez los independientes debamos, sin claudicar ninguna de nuestras posiciones, aprender a sentarnos y discutir abiertamente con autoridades, empresarios y políticos para abrir esos espacios nuevos de concertación y debate en defensa de las justas reivindicaciones que siempre sostuvimos. Por eso el ETI ha hecho públicos los documentos a los que ha tenido acceso sobre el proyecto de ley de teatro, su reglamentación, discusiones y opiniones de los participantes. Y por eso el ETI, reafirma su actitud de hacer partícipe a quien lo necesite de todo el trabajo realizado hasta la fecha, así como el compromiso de seguir demandando a los que están tomando las decisiones, que haya en el INT la mayor representatividad posible, que nadie quede afuera, que esté conducido por los mejores, que se informe de manera pública y rápida de cada peso que entre y salga, que se aliente a la participación y no a la exclusión. Queremos saber qué opinan los teatristas de todo el país.
Las puertas del ETI están abiertas.
ETI – Encuentro de Teatristas Independientes – Centro Cultural Fray Mocho.
Ecuador 380 – (1214) Capital Federal. Tel.: (01) 865 9835.