De Jorge Salinas (Barcelona, España) para Alejandro Robino y José Luis Arce: ¿Retipificar lo independiente?
Hola Alejandro. Cuándo te referís a “la última moda de teatro de Europa” ¿Qué quieres decir exactamente? Las tendencias en Oslo, en Palermo, en Varsovia, en Bilbao, o en Hospitalet, Montpelier, Trevinianno o Carabanchel. ¿A qué tendencias te refieres? ¿A las de los teatros nacionales, municipales u ocasionales? ¿A las asociaciones “gestoras de cultura” que dependen de las subvenciones públicas? ¿A las asociaciones "gestoras de cultura" que dependen de las subvenciones privadas? ¿A los teatros Of? ¿A los grupos amateurs? ¿A los teatros estrictamente comerciales? ¿A los que gestionan festivales supuestamente independientes, salvo por los intereses circunstanciales, con dinero público? ¿A los que gestionan festivales supuestamente independientes, salvo por los intereses circunstanciales, con dinero privado? ¿A los que proponen más de lo mismo? ¿A los teatros Of. – Of? ¿A los que proponen más de lo mismo, pero como no están en la gestión se quejan? ¿A los que no proponen nada? ¿A los que viven de la “sopa boba”? ¿A los otros? ¿A cuales? ¿A los que escriben teoría, a los que hacen teatro de títeres, de calle, de autor, circo, danza-teatro, niños, clásico, solteros contra casados, performances y “todos los etcéteras” que provienen de las “In- fusiones”.
Por favor ponme al tanto, porque quisiera enterarme “a ver si la pego”. Que Septiembre viene flojo y me gusta comer de vez en cuando. Sin pretensiones, de vez en cuando.
¿No será, Alejandro y José Luis, que esto no es un problema horizontal, de Córdoba o Barcelona sino vertical, de intereses, nada mas. “Lo que tu haces me sirve” “Me da prestigio…apoya mi manera de conducir…la política, lo que quiero hacer, o algo” “Te doy de comer y todos contentos”. He obviado a los que se quejan, critican y beben, pero no hacen nada. Porque, como no hacen nada...para mí…No hacen nada, no están. ...¿Qué pasaría si nos hicieran participar y además no nos pidieran nada a cambio?. Y razono en voz alta (sin creer que digo ninguna verdad) a los que dicen que tratan de ser "muy independientes en su pensamiento o razonamiento o en búsquedas de lenguajes teatrales"…"O en búsquedas de soluciones políticas" Un personaje de Woody Allen en “Sin plumas” dice: “A Kleimann lo conozco”…y el personaje central, que no recuerdo como se llama le responde intrigadísimo: ¿Conocerlo, conocerlo? Me parece que es tan difícil ser absoluto. Un abrazo.
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De Pablo Gonzalez Ellenberger (Córdoba, Argentina): ¿Retipificar lo independiente?
Entreverada la discusión, parece abrir varios frentes. Pero de repente me suenan los ecos de personas que no conozco y de repente asoman sus (re)posiciones a la de tiro la piedra y atájense, porque nadie está exento. Buenísimo para abrir los paraguas de las luces que hoy mas que iluminar esconden el verdadero problema, a decir de mi claro. Clandestino..., es una categoría que de considerarla desde una lectura diacrónica se podría enunciar como el estado en el cual alguien o algo estaría por fuera de. Ahora en el Festival de teatro Clandestino, alguien puede considerarse estar por fuera, al margen, ilegal u otro considerando al mismo nivel? Claro que no¡ En esta (seudo)democracia ya no hace falta estar en la clandestinidad. Ya que el régimen de ipso, muto por el actual. Pero el sistema capitalista sigue intacto. Los regímenes sean: la dictadura, el democratismo neo-liberal o populismo de manos vacías; deben tener un claro objetivo histórico y es contener cualquier intento de modificar el status quo burgués. Entonces proponer que los auto calificativos que se auto pregonan algunos seria auto victimizarse es una lectura: ligera y sesgada, que no contempla el espacio propio de enunciación en el que se quiere inscribir dicho concepto.
Yo he participado en los debates que se dieron en torno a el carácter clandestino de un festival, que además figura en la grilla del OFICIAL MERCOSUR FESTIVAL como paralelo o no oficial, y allí se descubre que la metáfora clandestino lleva a un sector de los teatrista a recrear este término en un sentido amplio y no restringido.
Y puedo decir que muchos de los independientes teatristas que antaño se replegaron en la clandestinidad hoy gozan de beneficios institucionales y aquello por lo que podrían haber sido perseguidos hoy se encuentra como parte de un recordatorio de hechos trágicos y no de una lección histórica que nos haga comprender como aprovechar las circunstancias de alza revolucionaria para hacerse del poder. Aquellos acontecimientos más bien trajeron la aniquilación de la vanguardia política, obrera-estudiantil, y a raíz de ello la claudicación de muchos “comprometidos” que por el miedo callaron y creyeron en los dos demonios.
Hablar de una nueva radicalidad, sin pensar en términos de revolución es creerse que la revolución se hace por televisión o por foros. Señores la historia la modificamos en la calle y no la ensayamos en un laboratorio, como algunos quisieran. Pero lo peor es que hoy plantearse estos términos es una perdida de tiempo. Muchos creen que los cambios vienen de arriba y así como esperaron, en vano, a Carlitos el turco, Fernandito “diarrea”, ahora esperan al pingüino “k” que solucione los problemas que tanto mal nos hace, ay, me duele el pecho en solo pensarlo, jaja. Pero bueno, la historia demostrará que para cambiar las cosas hay que estar comprometido no solo para discutir estos temas sino saliendo a las calles y enfrentándose con quienes defienden a este sistema. Ahí están ellos son los soldaditos del poder: de verde, de azul, con cascos blancos, violetas lo que sea, ellos defienden la propiedad de unos sobre la explotación de todos.
Y que vas ha hacer, enfrentarse querido. ¿te he encontrado en alguna marcha, en algún desalojo, en alguna ocupación? No creo, me parece haberte leído pero donde andabas cuando reprimían a los que pedían que se vayan todos. No me digas que estabas en la cola de tribunales porque querías que se haga “justicia” y te devuelvan los ahorros de toda mi vida, PORFAVOR SEÑOR JUEZ TENGA PIEDAD DE MI.
Legalidad vs Legitimidad. Nos quedamos con las instituciones que supimos conseguir o vamos a luchar por conseguir una verdadera democracia socialista (NO STALINISTA) en el que el Arte no sea un beneficio para unos pocos y encima los iluminados teóricos de la cultura nos digan que hay que mejorar el sistema de subsidios, el INT o cuanta institución cultural este dentro o fuera del Estado.
No me conforma. Voy por más y por ello no puedo decir que sea desde el arte en el que la sociedad se le rebelará la conciencia y salga a modificar el actual (des)orden de cosas.
No me convence. La historia está marcada por acontecimientos que nos demuestran que los cambios de sistemas son revolucionarios o no son. Los reformitas del paso a paso, del cambio evolutivo, muchachos miren y lean de nuevo.
El arte puede jugar un papel en todo esto, pero ello es una definición ideológica que debe tomar el artista y lo ubica históricamente de un lado o del otro. La vanguardias estéticas en algunos casos fueron parte de estos procesos como lo fue el futurismo en Rusia con los bolcheviques pero esta misma escuela en Italia estuvieron con el fascismo.
La vanguardia política puede y debe tener un programa cultural para nuclear a un sector más comprometido del ámbito artístico y cultural. Pero es cierto que muchos de los que hoy se dicen partidos de izquierda: no lo poseen. Y esto es debido fundamentalmente a las tareas que hay históricamente nos comprometen y ellas son económico-políticas y no culturales. Los cambio de un sistema político a otro es más veloz que el cambio de la subjetividad de las personas y por ello para pensar una sociedad en el que el arte sea libre primero no deben existir la explotación y alineación. Sin ello todo arte que se diga libertario y no proponga un cambio revolucionario de la sociedad será solo una expresión de deseo sin que realmente pongamos las manos en el fuego y salgamos a ver la verdadera realidad.
Los que dicen que militar desde la sola condición de “artista” es la permitida se quedaran mirando de costado la historia. Esta mirada anti-partido, anti-organización, aparece hoy en día como la expresión autonomista de que los cambios se realizarían espontáneamente por las masas.
No lo comparto.
Y con esto no digo que pertenezca a alguna organización, sino que creo que debemos construirla porque cuando las circunstancias apremien no vamos a estar a la altura necesaria para enfrentarlas y las lecciones de historia que debíamos tomar y sacar conclusiones no las supimos aprovechar. Toda lucha es una escuela revolucionaria y ahí creo que puedo aportar.
Independiente de la clase que domina, sí, y también se encuentra en el ámbito de producción simbólica.
La independencia esta dada en relación a los objetivos que me planteo y no a los medios que elijo para realizarlos. Es una independencia moral y de principios que no me atan al enemigo pequebuss. Hago lo que creo y lo que debo. Y también acepto subsidios y ofertas laborales de este sistema de mercado cultural pero no por ello voy a dejar de pensar que hay que cambiarlo. Para mi ahí se encuentra la independencia.
Para aquellos que otrora soñaron con una sociedad distinta, hoy sigue vigente y más que nunca aunque los intelectuales posmodernos nieguen cualquier cosa que se diga por la transformación. Sino veamos el mundo y nos encontraremos que las cosas no están dichas desde un sillón.
No hay revoluciones tempranas crecen desde el pie...
De José Luis Arce (Córdoba, Argentina): Para compartir (Foro Celcit)
Ya que estamos con el tema Teatro Independiente, les extiendo la Editorial del Boletín Informativo de La Coordinadora del Arte Teatral Independiente de Córdoba, firmada por su Presindente, el actor Ricardo Bertone.
(N.de GMcL: el furcio Presindente/Presidente... ¿habrá sido a propósito?
DUDAS EXISTENCIALES
Puestos a pensar sinceramente y entregados libremente al desprejuicio, nos preguntamos cada vez con más frecuencia si servirá para algo la existencia de nuestra propia organización. Algunos de los que terminan de leer lo antes escrito estarán sinceramente molestos, otros (desconocemos cuán diferente es el porcentaje) exclamarán en distintos tonos de voz algo así como “era hora que se dieran cuenta”.
La Coordinadora del Teatro Independiente de Córdoba se creó con el espíritu de estimular la producción escénica independiente de las maneras más variadas y aquellos que estuvieron en sus comienzos tenían la ilusión de que fuera un ámbito desde el cual el intercambio entre artistas, la formación permanente y el desarrollo artístico, fueran fruto de un trabajo asocia-tivo, con la participación de los miembros de la actividad. La sola idea de preguntarnos qué paso, merece un inmediato rechazo ya que nos instalaría en esa cómoda posición desde la cual cada uno puede encontrar la explicación más aceptable para su propio alejamiento, o atribuir motivos y explicaciones que sólo servirían para alimentar el volumen de la leche derramada.
La pregunta que nos mueve es otra: ¿hay consenso para emprender en forma conjunta algunos caminos que lleven al enriquecimiento de la actividad? Como no tenemos respuesta, traslada-mos la pregunta al que lea esto. Lo que sí observamos es que nos estamos moviendo en un medio donde pareciera que las acciones más significativas apuntan al dinero o al prestigio. Y la Coordinadora no aporta ninguna de esas dos cosas.
Lo que nos parece extraño es que no haya interés, o que exista a nivel casi nulo, por generar un proyecto abarcativo, por que haya gente que tenga ganas de hacer un aporte de experiencia al nivel de calidad de la actividad desde el lugar que se encuentre. Por el contrario la atomización casi diasporizada es el modelo desde el que nos proyectamos, y cuando queremos hablarlo, cada uno mira para otro lado.
Mientras tanto, la actividad allí va, prolífica al extremo para algunos que han logrado ¿instalar en el mercado? media docena de productos en un año, aceptable para otros que han logrado zafar con la suma de subsidios que alientan la esperanza de seguir, plena para otro grupo que ha corrido sin parar de un lado para otro en una maratón por la permanencia y frustrante para otros tantos que engordan el esfuerzo cotidiano sin que el sudor riegue la planta de los resultados. En medio de esto, ¿nuestra escena cordobesa tiene un perfil?, ¿va optando por alguna orientación?, ¿hay una ética artística que caracteriza al medio?, ¿hay margen para la crítica objetiva y el conversar sincero sobre nuestra dificultades?. Como sector, ¿somos parte de un proyecto que puede encauzarse, corregirse, estimularse, controlarse, desarrollarse..., etc., etc.?, o somos una suma de ocurrencias que llegan a tal o cual puerto en la medida de la fuer-za y/o la influencia del timonel del barco. ¿Somos un sector de la sociedad con un perfil y un proyecto que avanza en el tiempo, o una suma de individualidades que, mientras tanto, hacemos teatro como podemos?
Hasta hoy no tenemos respuesta.
Comisión Directiva de la Coordinadora 2006/08:
Ricardo Bertone, Presidente.
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De Adrian Sola (Trujui, Argentina): Comedia de la Provincia Buenos Aires
Estuve tratando de poner en claro (para mi) el proyecto que implementaría la Comedia de la provincia de Buenos Aires. La misma que, al día de hoy, no le ha pagado un peso a los ganadores de los regionales y provinciales del 2005.
Sin duda lo más revolucionario es que lo que antes llamábamos REGIONES han sido sabiamente bautizados CORREDORES. Del agrupamiento que harán de estos CORREDORES surgirán 3 AGRUPAMIENTOS:
AGRUPAMIENTO Conurbano
AGRUPAMIENTO Bs.As. Norte
AGRUPAMIENTO Bs.As. Sur
Los REGIONALES dejarán de hacerse. Los REGIONALES son la única ocasión en que la COMEDIA hace algo para toda la provincia. ¿Qué harán entonces? Veamos
Teatro Infantil: Se seleccionarán 12 elencos de toda la provincia por VIDEO y CARPETA. Estos 12 elencos irán al PROVINCIAL.
En el PROVINCIAL se elegirán: Un ganador que recibirá $10000.- , una 1º mención que recibirá $6000.- y una 2º mención que recibirá $4000.-
Teatro de Títeres: Igual que en Teatro Infantil.
Hasta ahora tenemos:
2 elencos que recibirán $10.000.- (Ganadores)
2 elencos que recibirán $ 6.000.- (primeras menciones)
2 elencos que recibirán $ 4.000.- (segundas menciones)
Ahora pasemos a Teatro para Adultos:
En cada AGRUPAMIENTO se hará una seleción 12 elencos por VIDEO y CARPETA. Cada uno de estos 12 participará un regional que tendrá 4 ganadores que recibirán $4.000.- cada uno y además irán al PROVINCIAL.
Una vez en el PROVINCIAL, se elegirán:
1 ganador que recibirá $10000.-
1 1º mención que recibirá $6000.-
1 2º mención que recibirá $4000.-
EN TOTAL, QUIENES GANEN EL PROVINCIAL DE ADULTOS SE LLEVARÁN $4.000.- (LOS DEL REGIONAL O COMO QUIERAN BAUTIZARLO) MÁS QUE QUIENES GANEN EN INFANTIL O TÍTERES. ¿POR QUÉ SE HACE ESA DIFERENCIA? ¿EL TEATRO INFANTIL Y EL DE TÍTERES SON MENOS IMPORTANTES, SEGÚN LA COMEDIA? NO PODEMOS QUEDARNOS CALLADOS ANTE ESTAS DIFERENCIAS. Saludos
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Foro Celcit 711 – 28/8/06
De Maria Eugenia Yaique (Salta, Argentina): ¿Retipificar lo independiente?
Coincido con Brie. La revolución aparece como la utopía que nos hace sentir diferentes y de avanzada, pero no siempre es posible sin costos demasiados altos. Ello por cierto no supone el conformismo, o la reforma para que nadie cambie. Se trata simplemente de ahuyentar las recetas importadas de revoluciones que nos son ajenas. Es la idiosincracia de cada pueblo, su textura, su paisaje humano el que determina en definitiva la "revolución posible". Y esa revolución posible no puede prescindir de lo que muchos intelectuales pregonan pero olvidan, siempre el destinatario es el hombre, el de carne y hueso, el concreto no el ideal, el que lucha cada día por sobrevivir a la miseria e intenta compatibilizar su realidad con la dignidad. No creo en las recetas mágicas importadas de textos, teorías y experimentos. Nuestra realidad posible es la que marca el derrotero, que intenta como causa y efecto, la dignificación constante del hombre. Por cierto ello supone esfuerzo, trabajo, saturación, pero por sobre todo militancia cotidiana para que el punto de equilibrio lo manejemos solo nosotros que somos en definitiva los que hacemos la historia. No necesitamos héroes, necesitamos seres vivos urdiendo la maravilla de la vida. Tampoco es necesario inmolarnos en la búsqueda, está al alcance de la mano, solo es cuestión de conciencia, aceptación, decisión y trabajo, trabajo, trabajo... ello no impide seguir soñando pero no a costa de sangre, sudor y lágrimas, que siempre es sabido, vienen de los de abajo.
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De Carlos Ianni (Moderador): Convocatoria
CONVOCATORIA PROGRAMA DE FORMACION DE ESPECTADORES RÍO NEGRO
Durante el año 2006 y 2007 se implementará en la Provincia de Río Negro el Programa de Formación de Espectadores.
El mismo estará dividido en dos etapas, una primera para la formación de los responsables de aplicar el programa (Unidades de Trabajo) que contemplará de septiembre a diciembre del 2006; y una segunda etapa que será la aplicación del Programa con las escuelas, que corresponderá al año escolar del 2007.
Los objetivos de dicho Programa, brevemente, son:
OBJETIVOS PRINCIPALES Y METODOLOGIA.
Alumnos en las salas. Consiste en convocar a los alumnos de las diferentes escuelas a las salas de teatro para ver obras que actualmente se encuentran en cartel. Se destinará cinco minutos para introducir a docentes y alumnos en algunos lineamientos básicos del teatro actual. Luego se verá el espectáculo y posteriormente se hará una charla-debate con los alumnos y los protagonistas de la obra. Finalmente se le entregará al docente una guía de trabajo para el aula.
Capacitación docente. El programa creará un curso-taller teórico y práctico, donde se darán las herramientas de análisis de la puesta en escena del teatro contemporáneo (a través de videos y otros materiales), se darán guías de cómo trabajar estos conocimientos en el aula y se realizarán actividades consistentes en llevar a los alumnos a ver espectáculos para aplicar este funcionamiento pedagógico.
OBJETIVOS SECUNDARIO
Impulsar la actividad teatral. Mediante este Programa se movilizan y se le inyectan fondos a varios sectores del quehacer teatral. Los grupos que hacen las obras ante los alumnos y cobran por sus funciones, los docentes teatrales que conforman las Unidades de Trabajo, y las Salas que generan funciones pagas en horarios donde habitualmente no hay funciones.
Avanzar en la Co-Gestion. Este Programa, en su segunda etapa, solo será posible si se logra la participación de otros organismos, aparte del INT. En principio ya ha confirmado su participación con financiamiento para el 2007 el Consejo Federal de Inversiones. También hay gestiones iniciadas con el Ministerio de Educación y la Agencia Cultura Río Negro.
Capacitar en la gestión. Las Unidades de Trabajo además de ser responsables de la aplicación concreta del Programa con los alumnos y docentes de las escuelas, también deberán hacer un importante trabajo de gestión con otros organismos. Si bien la responsabilidad de este tema recaerá en la figura del Representante Provincial, las Unidades de Trabajo deberán realizar aportes en gestión constantemente, algo que se sabe es un déficit en el quehacer teatral. Además el Programa se implementará en las ciudades donde las Unidades de Trabajo encuentren los apoyos necesarios, tanto provinciales como municipales.
CONVOCATORIA
La Convocatoria está vigente desde el 1 de agosto al 31 de agosto.
Se seleccionarán 3 unidades de trabajo. Una Unidad de Trabajo por Zona.
El detalle de las zonas es el siguiente:
Zona Andina: Bariloche – Bolsón – Jacobacci
Zona Atlántica: Viedma – San Antonio Oeste – Beltrán – Río Colorado
Zona Alto Valle: Cipolletti – General Roca – Villa Regina
Cada Unidad de Trabajo tendrá todos los gastos cubiertos (pasajes – alojamiento y comida) durante la capacitación y cobrarán a modo de honorarios $900 total para la Unidad de Trabajo.
Las Unidades de trabajo, una vez seleccionadas, tendrán una instancia de capacitación en Buenos Aires en el mes de septiembre, y otra instancia de capacitación en Bariloche en el mes de Octubre.
La Unidad de Trabajo será la responsable, junto al Representante Provincial del INT, de las gestiones necesarias para la aplicación del Plan.
La capacitación, la gestión y el diseño final de la aplicación del plan se realizará durante el segundo cuatrimestre del 2006.
La aplicación del Plan con los alumnos se realizará durante el 2007.
Los requisitos de los postulantes son:
Una de las dos personas deberá tener título docente en teatro, actuación, dramaturgia, dirección o historia del arte con orientación en teatro o similar.
La otra persona deberá tener un perfil más teatral con experiencia comprobable en algún ámbito y función teatral (dirección – actuación – dramaturgia – investigador).
Puede ser que una o las dos personas cumplan con ambos requisitos.
Una de las dos personas deberá tener factura propia para el cobro de los honorarios.
Los interesados deberán presentar:
Currículum de cada uno de los integrantes de la Unidad de Trabajo dejando claro cual de los dos será el responsable, quien deberá ser el que posea el título docente.
Copia del título.
Para realizar cualquier consulta comunicarse con la representación Rio Negro del Instituto Nacional del Teatro (Tel: 02944 432337 Mail: rionegro@intearo.gov.ar).
El material deberá ser entregado a la siguiente dirección:
Representación Río Negro – INSTITUTO NACIONAL DEL TEATRO
Otto Goedecke 264 – Bariloche (8400)
Tel/fax: 02944 432337
Mail: rionegro@inteatro.gov.ar / Web: www.inteatro.gov.ar
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De José Luis Arce (Córdoba, Argentina) para Alejandro Robino: El desierto crece
Alejandro, entiendo el paisaje que te taladra. Entiendo y comparto tus afanes, como leí atentamente las dos notas que mencionás, al punto de comentarlas especialmente en la Mesa de Redacción de la Revista 'El Apuntador' y recomendar que se te propusiera desde ese humilde medio, un aporte para cuando abordemos el tema, condicionado por la síncopa de su trimestralidad, es cierto. Lamento no haberlo dialogado con vos por el Foro. Yo mismo dejé incompleto mi aporte sobre 'Teatro Sagrado' por tu misma sensación. A veces media una simple cuestión de tiempo y oportunidad. Pero comparto tu indignación porque marca una carencia en las bases teatrales. ¿Esto es simple aire de época, alienación de los poderes instituidos que nos privan de ser instituyentes? Sería un primer paso, atender el problema en nosotros mismos. Para no hacerla lunga, en lo personal he asumido ya no estrategias de masas, sino trabajo de hormiga. Los empeños de masas de mi generación terminaron por ejemplo, en este momento, con un Gremio de Actores transformado en oficinita para proveer de Factura con Cuit al %6 pago, a quienes no la tienen. También la dirige un ex actor del TIC (hay que asumir los 'ex'). Desde ya que 'lo independiente' me toca de una manera que excede la especificidad del Instituto. En el 79 fundamos El TIC, Teatro Independiente de Córdoba, haciendo ostensible en la genérica denominación la evidencia de que las banderas habían caído (como tantas otras cosas), postura que tenía una dimensión integral que iba desde nuestra forma de vida, pasando por nuestro aprendizaje, nuestra acción político-cultural, etc. Un día, a sus 20 años, dimos de baja a dicho grupo, en mi caso para recuperar mi nomadismo espiritual intrínseco. Rechacé tener sala propia por ejemplo, para poder sobrevolar con ánimo leve, como dice Italo Calvino, ciertos paquidermismos conceptuales. Ojo, esta era una opción personal, no una condena a mis colegas que las tienen y se desloman para mantenerlas. Acá las estrategias son las acciones puntuales dentro de una táctica que se relaciona con una concepción de vida general. Para mí el asedio a las gestiones no es la lucha, se trata de otra guerra, una guerra de sustancias. No es lucha de poder, sino una batalla ética que debe celebrarse con artistas contra los que no lo son. Una pregunta es, si debajo de ese cierto frenesí que se adscribe a la lucha, hay realmente una sustancia. Digo que también estoy inundado de suspicacias como para caer en la peronisteada fácil de consensos artificiales. Por eso no hay que confundir lo puntual con lo coyuntural, porque con tales vocablos se alude a cuestiones de tiempo en unos casos y a cuestiones de espacio en otros. Hay un trabajo que se liga a lo intangible y que el paso de una generación a otra puede hacer trastabillar y hasta jaquear el sentido patrimonial conque el sector debiera cuidar sus propias herramientas (intangibles o materiales). No se escapa que hay una crisis discursiva de los líderes que es pasmosa. Nos pasa con nuestro presidente que no habla (salvo en actos oficiales de auto-bombo) y cuyo vacío, de pronto lo cubren Castro o Chávez (hay que ver que su presencia supera la mera articulación de expectativas de izquierda, y convocan a todo el mundo), haciendo evidente una incapacidad estructural para sostener y trasmitir un conocimiento de valor social. El 'silencio-stampa' que te embronca, es parte de un síntoma que merece lectura. No es un lastre del problema, es un factor del problema. Habría que ver sino por qué Urdapilleta y Audivert dan legitimidad a un proyecto como el que los tiene de protagonistas en Lear, cuando la opulencia puesta a los pies de Lavelli, subsume la problemática real de nuestro teatro. Lavelli no representa el proceso estético que tiene en esos excelentes actores una dimensión superior al significado actual que pueda proveer como 'experiencia teatral' tal director. Sobretodo si sus bases de origen, están segregados (léase Bartís por ejemplo, para cumplir con lo de hacer nombres). Digo que en el cambio, los citados actores pierden, mientras el Julio Grondona de la Cultura argentina (Kive Staiff) puede refregarse las manos por su sagacidad a prueba de fuego. Que propongas una redefinición (eventualmente una re-significación) de 'lo indepenciente' lo comparto plenamente. Una reforma que absorba esa re-definición, entendiendo que esta supone nuevas problemáticas, nuevas necesidades, imperiosos aggiornamientos, sólo podrá llevarse a cabo con consenso. Es claro que no se puede plantear esto si no hay una carnadura política en el sector. Los organismos 'puentes' deben volver a cobrar vida (Actores, Coordinadoras, Red de Salas, asociaciones de dramaturgos, directores, técnicos, etc.). Dijera Piglia, no se puede tener una historia verdadera con 'respiración artificial'. Bajo estas condiciones, lo que tiene que morir ha de morir. Hay que dialectizar esta figura de 'lo independiente' que de hecho pasa a ser de derecho para adquirir juridicidad en la Ley de Teatro (con las aclaraciones que hacía Ianni al respecto). Deponer sin procesar, implicaría hacer que tal figura jurídica (¿así se dice?), al ser re-definida, conduzca a algunos a pensar que ser independiente ha sido un fracaso. Mirá, hoy mismo, como se deduce de la nota que aporté del actor Ricardo Bertone, el organismo que puede canalizar al teatro independiente en mi provincia, está empezando a debatir por la verdadera necesidad de su existencia, después que dio motivos y allanó el camino a las políticas que hoy para mal, para bien, son el statu quo, aún bajo este formato de 'Planes jefas-jefes' que suponen los subsidios y que han quiosquerizado el teatro. Asumamos también, en Córdoba es así, que hay un porcentaje de gente que no trabaja por decisión propia con ningún aporte del Estado. Algunos de esos grupos, con premisas de máxima, siguen yendo a villas, a pueblos, a barrios y suelen sumarse al llamado Festival Clandestino. En esto hay que asumir que un diálogo intergeneracional es imprescindible para entender algunos contenidos históricos, que no pueden ejercerse como una simple bajada de línea patriarcal de viejos sobre jóvenes, en un acto filicida más, a los que ya nos tiene acostumbrado la cultura argentina. Esos 'indiferentes' en muchos casos, son los cagados por nuestra historia gallinero y que hacen su impremeditado ajuste de cuenta a través de un cinismo nihilista, que muy bien estaba incluido como presuposición en la profecía de Nietzche sobre 'el desierto que crece'. En este punto, estoy pensando en Tantanián, en la entrevista de su libro 'Foolyk' al referirse a Cossa, es decir, que lo que debería estar eslabonado lógicamente, no lo hace sino por actos de poder, lo que se puede extender a los mecanismos de discernimiento, elección en concursos, donde se ejercen criterios que no trasuntan ni revelan una idea cierta de teatro. Sólo funcionan como un poder de turno, como poder instituido. Para no extenderme, quería decir que aparte de la Coordinadora de Córdoba, ahora mismito nos ocupará con su destino, tema en el que no descarto la resonancia que plantea el francés Denis Guenoun en su libro "¿Es necesario el teatro?" En 'El apuntador N° 16' salen entrevistas a gente de teatro muy picante que da sus pareceres (sale a fin de mes). Vos sabrás Alejandro, que eso también es un duro trabajo, aunque insisto, de hormiga: buscar la gente, entrevistarla, hacer las galeradas de sus opiniones, todo para crear corrientes de opinión y análisis. Y ad honorem justo es decir. Uno convive con 'crearse condiciones' de manera permanente y no coyuntural. Es una cuestión de vida donde hay distintas estrategias. A vos te interesa el Instituto. La inquietud yo la trabajo en este momento (aparte de la acción y producción de siempre), con grupos de reflexión. Participo junto a otros colegas de 'Teatro en De-construcción', 'Lectura en De-construcción', Encuentros de intercambio: Diálogo 1, Diálogo 2. Trabajo a mail abierto con colegas sobre diversos temas teatrales de actualización, tanto temática, como metodológica. Todo a pulmón batiente. La seguimos.
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De José Luis Arce (Córdoba, Argentina): ¿Retipificar lo independiente?
Creo que no es casual que aparezca la reflexión de la revolución en relación a lo independiente. Es un signo indicativo que éste lleva ínsita la problemática de la libertad. En una magnífica frase que le escuché a Cossa, él decía que la materia prima del Arte (o arte para que nadie se enoje) es la libertad. Por eso el cinismo que conduce a que 'lo independiente' merezca, cuando es lo que te define, preguntas como: "¿independiente de qué?", son posibles porque se duda en todo caso que tal materia prima sea posible o en todo caso que ya no estamos preparados para ser libres, con la subliminal implicación de que nuestros mejores esfuerzos por ella (la libertad), están consagrados a nada. Sería un nihilismo liso y llano. El teatro de creación, esto es, el teatro como arte es una realidad posibilitada, que el usufructo de la política devuelve al terreno de una falta, de una ausencia, a un estado de proyecto cuando su signo ya está concretado. Es en este sentido que el filósofo y el poeta dicen que la realidad aprende del arte. Estoy en contra de tal ausentización, de esa desontologización que hace la política usufructuadora y que tiene en la 'desaparición' de Meyerhoold, por decir, un ejemplo paradigmático. Cuando más revolucionario fue el artista, menos le sirvió a la revolución. Lo sustrajeron, lo chuparon, lo arrojaron en un vuelo de la muerte. El Régimen no necesitaba que el sueño se anclara a una Forma. A ese espejo no podía tolerarlo. Era demasiado veloz y desafiante. La Revolución espiritual del artista, aunque parezca paradójico, cuando choca con la Revolución de los hombres convierte a estos, en el capitalismo o el comunismo, en 'pequeños hombrecitos' de los que hablaba el revolucionario psicoanalista Wilhelm Reich, disimulando la forma encarnada con que el artista dota a sus acciones. La peor derrota de Marx es que tenga que sobrevivir por una especie de función evocadora. Por una saudade, digamos. Los grandes filósofos a veces necesitan de una ayudita de los amigos, como decía aquella canción de los Beatles que cantó desgarradoramente en Woodstock Joe Cocker, en una de las más históricas vocalizaciones de un tema que jamás se verá en un escenario y que fue un verdadero grito del siglo. Los niveles científicos, impuestos a partir de la ruptura epistemológica que derrotaba a la mera doxa, no llegaron a las masas a la velocidad que esta encontraba en los cambios perceptivos devenidos del proceso de industrialización y luego de informatización, hasta llevarlos a niveles impredecibles. El autor de la más genial descripción del capitalismo no puede corresponderse con un fundamentalismo revolucionario enajenado. Un signo puente para la instalación de ese recordatorio histórico es el Arte, a quien no se le delega ninguna condición sino que funciona per se como signo de cambio, de disvalor en la teoría del valor, de discontinuidad en la cinta sin fin mecanizante de lo serial e igual, como fractura identificante en lo lineal embrutecedor y masificante, como una ruptura de los modelos antropológicos en el plano de lo que es humano. Y es lo que tampoco se le perdona. Porque las revoluciones son tales cuando se las hace, no cuando se las defiende desde el poder. Esa es una condición política innegociable de 'lo independiente' en tanto disímiles estrategias, resguardan la política intransable de la libertad. Si la sociedad es un crimen cometido en común, la majestuosidad de la singularidad encarnada que representa un artista, fiscaliza la culpa impaga aún a costa del atentado que no soporta la lógica de lo insobornable. Si lo único verdadero es la realidad, la demiúrgica instancia del poeta materializando ideas, sueños, utopías, torna en un poder subversivo y de cuidado que no se perdona. Lo independiente no es sólo ideológico, ético, político, es también un concepto económico que supone que aunque el Estado me provea medios, tengo el derecho a que, pensando en mejorarlo, lo critique, o me comporte con mayor libertad y no con espíritu de devolución de un favor.
Entonces, la pregunta 'independiente de qué' supone el desmontaje de la conciencia opositora, detrás de las mieles de la subsidiariedad y en vez de cooperativizar esfuerzos, a corporativizado las disponibilidades pagadas por el pueblo, que como aprendices de nuevos empresarios, administramos desde las nuevas salas como nuevos empresarios
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De Ariadni Mavrakis (Buenos Aires, Argentina): Revolución
Realmente, hubiera querido escribir sobre varios temas, porque demoré en leer y se amontonaron noticias del Foro. Me voy a limitar a poner la idea de revolución con la que concuerdo totalmente, ya que varios compañeros del Foro trataron el tema:
Es sentido de momento histórico.
Es cambiar todo lo que DEBE ser cambiado.
Es ser tratado y tratar a los demás como seres humanos.
Es emanciparnos por nosotros mismos y con nuestros propios esfuerzos.
Es desafiar poderosas fuerzas dominantes dentro y fuera del ámbito social y nacional.
Es defender valores en los que se cree al precio de cualquier sacrificio.
Es modestia, desinterés, altruismo, solidaridad y heroísmo.
Es luchar con audacia, inteligencia y realismo.
Es no mentir ni violar principios éticos.
Es convicción profunda de que no existe fuerza en el mundo capaz de aplastar
la fuerza de la verdad y las ideas.
Es unidad.
Es independencia.
Es luchar por los sueños de justicia para nosotros y para el mundo.
Esto lo dijo Fidel Castro el 1 de mayo del 2000.-
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De César Brie (Bolivia): ¿Retipificar lo independiente?
¿Revolución o reformas?
¿Vivir en la miseria posible o hacer la revolución?
Con mucho respeto por lo que se dice quiero aportar algo.
La palabra revolución nos atrae como la sangre atrae las moscas.
Las revoluciones sociales son siempre carnicerías.
Bolivia hoy día tiene tres opciones: La revolucionaria : la victoria de los sectores populares y la destrucción de la reacción (que significaría miles de muertos y no precisamente oligarcas). Santa Cruz tiene enormes sectores de su población que hoy, embanderados detrás de la autonomía "cruceñista", irían al muere en una guerra civil.
La segunda opción es la victoria de la reacción, con miles de muertos también y con la destrucción de una esperanza construida en años de luchas y sacrificios.
La tercera opción es el pacto, menos romántica, menos aparentemente "noble", pero que ahorrará al país sangre, divisiones inmensas y que consiste en extraer leyes más dignas de la relación de fuerzas. Con esta tercera me quedo y para esta tercera opción trabajo.
Personalmente trabajo para el hombre de mi tiempo, y el hombre de mi tiempo es para mí espíritu y cuerpo. las necesidades espirituales y las necesidades materiales. Ambas en eso que llamamos el hombre que queremos.
Tengo algunos principios: no permitir nunca la imposición de una fuerza que no esté al servicio del espíritu.
Este trabajo parece sobrehumano. Por eso las salidas violentas nos parecen muchas veces un camino más corto. Lo sobrehumano no es más que aquello que debe ser hecho a lo largo de más de una generación. No nos queda que trabajar entonces. Sabemos que lo que para las elites ( y las charlas de café) se llama historia, para los que estamos metidos dentro de los procesos no es más que trabajo. A trabajar entonces, con la voluntad de las hormigas y el canto de las cigarras. Un abrazo a todos.
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De José Luis Arce (Córdoba, Argentina) para Pablo González Ellengerber: ¿Re-tipificar lo independiente?
Pablo, en términos sectoriales, Córdoba es una aldea y pese a que uno siente que nos conocemos todos, a vos no te saco, disculpame. ¿Me podés orientar con el grupo en el que trabajás? Me gustaría plantear en serio y profundidad el tema que te interesa, pero no prestarme a un síndrome 'choque de vanidades' como con Robino, para terminar en diálogo roto, luego que prometimos una sesión de pirotecnia hecha con pólvora por nosotros mismos descubierta, y terminar en un mero flato al viento. Un papelón. Digo que, para que no caigamos en un maximalismo etéreo, ni nos hagamos pasar por unos tigres peligrosísimos, hablemos de cosas concretas, de lo que hizo o hace cada quien. ¿Te parece? Creo en la transformación del mundo, pero quizá ya no en la revolución que vos preconizás. Y no porque sea un desengañado o un desencantado, más bien creo que soy un optimista pelotudo. Las condiciones para un proyecto como el que vos planteás, han cambiado ¿no creés? Del cambiar la vida (Rimbaud) al transformar el mundo (Marx) puede haber una multitud de estrategias que de ninguna manera creo que en este momento pasen por ahí. No tengo duda que el consignismo revolucionarista es la coartada fanfarrona en un país que amenaza irse al abismo por la falta de oposición. Pintar por pintar en una marcha de desalojados, estafados y desocupados "Fuera yanquis de Irak", es delirante, onanista, enfermo y reaccionario.
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FORO CELCIT 31/8/2006
De Mario Cracogna (Avellaneda, Santa Fe, Argentina): ¿Re-significar lo independiente?
Mi aporte será uno más en la misma línea que trazaron las acertadas intuiciones y comentarios de A. Robino, José L. Arce y otros. Me pregunto. ¿Cómo se puede hacer teatro hoy en Argentina en poblaciones con menos de 50.000 habitantes? La cuestión de si es o no independiente pierde cierta relevancia porque es fagocitada por otra que la arrastra por peso específico: ¿es posible hacer teatro o mantener el teatro en poblaciones reducidas? ¿Cómo se hace? ¿Debe hacerse todo a pulmón y sin cobrar un mango? ¿los actores no comemos, no pagamos alquiler, no nos enfermamos? Después de laburar durante cuatro, cinco meses para armar un espectáculo, con tres o cuatro noches por semana de ensayos, las funciones no pasan de cinco o seis, a lo sumo, y la obra se "baja" de cartel. Los actores se vuelven a sus casas con los corazones llenos de arte teatral pero con los bolsillos vacíos. Cada uno vive de otra cosa: albañil, profesional, oficinista, jubilado/a, etc. por lo tanto, el teatro es una actividad vocacional "de aficionados", un mero pasatiempo lúdico, una forma de conocer gente y crear nuevas amistades. Así es, creo yo, en la mayoría de los casos, la manera de "hacer teatro" en las comunidades pequeñas. Esa impronta de los pueblos que le da al actor la certeza de que su trabajo es valorado por su comunidad, no existe. Por el contrario, el actor percibe que su arte no es requerido ni valorado por sus convecinos. Se la considera una actividad prescindible, menor. Si bien, las secretarías de cultura acompañan algunas iniciativas teatrales, lo hacen hasta el monto fijado en los misérrimos presupuestos oficiales, y en muchos casos las erogaciones están direccionadas políticamente a favorecer a fulano o a mengano. Se carece de proyectos globales para cultura, nadie convoca para hacerlos, porque si el gobierno es peronista nunca podría aceptar una idea que proviniera de un radical o de uno del Pro. O al revés. Es el imperio del lumpenaje cultural, del dale que va, total, ¿a quién le interesa favorecer el acceso a los bienes culturales y la educación integradora e inclusiva de la gente? ¿a quién le interesa promover una construcción colectiva que nos involucre a todos y que re-signifique lo cultural y lo nacional en épocas de crisis? Hasta las palabras nos juegan en contra: re-significar, revolución, cultura popular, etc. porque perdimos de vista el sentido del trabajo colectivo, quizás. Y el teatro es una labor de muchos para muchos. O tal vez nos jueguen a favor, si las usamos incorporándoles nuevos elementos extraídos del sustrato social profundo y no de anaqueles de librerías. Los actores en ésta estamos solos, como Bonavena ("cuando suena la campana ni el banquito te dejan"). Si logramos pensar, sentir y actuar en una misma dirección, en la línea de un arte escénico que reivindique (re-descubra) la esencia de lo nacional (y lo universal) haremos que las boleterías se agoten, de los pueblos y las metrópolis, porque, al fin, ha encontrado el pueblo a sus artistas, a sus actores, portadores de una multivocidad unívoca (vale la contradicción), y colaboradores en la tarea de urdir una sencilla y compleja trama de destinos que empiezan a tirar parejo para re-fundar una res-pública.
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De Pablo Gonzalez Ellenberger (Córdoba, Argentina): ¿Retipificar lo independiente?
Si me permiten alguna transcripciones de un artículo firmado por Diego Rivera y escrito por León Trotsky en enero de 1939 en la Revista en Clave, titulado “La ignorancia no es instrumento de la Revolución”.
“Uno de los periodistas del APRA, un tal Guillermo Vegas de León....se cree en el derecho de atacar a Diego Rivera como hombre y como artista.
A la manera de Lombardo Toledano (1) y de otros “socialistas” burgueses, Vegas León acusa a Rivera de vender sus obras a la burguesía. ¿Pero quien, en la sociedad capitalista, puede comprar pinturas sino la burguesía?. La enorme mayoría de los artistas dependientes de la burguesía por las condiciones sociales, está, unidos a ella ideológicamente. Rivera constituye un caso excepcional porque mantiene su independencia moral total con respecto a la burguesía. Es por esta razón que merece ser respetado por todo obrero y socialista y por todo demócrata sincero.
Haya de la Torre llama a los EEUU. “el guardián de nuestra libertad”... El camarada Rivera condena con justeza la idealización del imperialismo norteamericano.
Los marxistas revolucionarios pueden llegar a acuerdos con los demócratas, pero precisamente con aquellos que son revolucionarios, o sea con aquellos que se apoyan en las masas y no en la gallina protectora. El APRA, es una organización de la democracia burguesa en un país atrasado semi colonial ...se encuentra dentro de la misma categoría que los populistas... Sin embargo esto no les ha impedido jugar el rol de demócratas pequeños burgueses atrasados que no tienen la fuerza para realizar las tareas puramente democráticas a pesar del espíritu de sacrificio y de heroísmo de sus mejores combatientes.
El camarada Rivera afirma, que los pueblos oprimidos no pueden obtener su emancipación completa y definitiva si no es a través del derrocamiento revolucionario del imperialismo...
México expropio las empresas petroleras, ¿esto no es un paso hacia la emancipación de este país hacia la emancipación de su dependencia con el imperialismo?....
Es absolutamente cierto que México ha dado un paso adelante hacia la emancipación económica expropiando las empresas petroleras. Pero Vegas León cierra los ojos ante el hecho de que México como vendedor de productos petroleros, ha caído ahora -y esto es inevitable- en la dependencia con otros países imperialistas.
Solo los idealistas utópicos pueden describir el futuro de México y el de cualquier otro país colonial o semi colonial como un porvenir de constantes acumulaciones de reformas y conquistas hasta que eso lleve a la emancipación completa y definitiva. De la misma forma, los social demócratas, esos clásicos oportunistas, esperaron durante mucho tiempo lograr transformar la sociedad a través de continuas reformas sociales y llegar así a la emancipación completa del proletariado entero. La acumulación de reformas democráticas en numerosos países no ha tenido como resultado el socialismo sino el fascismo. Algunas conquistas pueden ser arrancadas de forma relativamente pacífica en ciertas condiciones favorables. Pero esto no significa en absoluto que tales conquistas parciales van a proseguir sin interrupción hasta la realización de la independencia completa.
...estamos lejos de recomendar al pueblo Latinoamericano que espere pasivamente la Revolución. Quien espera pasivamente no obtiene nada. Es necesario continuar luchando sin descanso, extender y profundizar la lucha en armonía con las condiciones históricas realmente existentes...
¿qué significa la URSS para León, una noción geográfica o un fenómeno social? Es imposible ser amigo del pueblo de la URSS sin ser enemigo de la burocracia “soviética”.
A los trabajadores peruanos:
¡No crean en individuos del tipo Vegas de León: son pequeños burgueses conservadores que no comprenden la lucha de clases y son, en consecuencia, totalmente incapaces de dirigirlos en su lucha por la emancipación nacional y social y no pueden aportarles más que derrotas!
Pensamos que hemos dicho bastante. Los insultos y las insinuaciones de Vegas de León no son argumentos. La ausencia de vergüenza no es excusa para la ignorancia. Y la ignorancia no es instrumento de la Revolución.”
¿Pasado o presente? Me disculpo por la extensión, pero creo sinceramente que expresa una visión tan actual y analógica a las discusiones que entorno a ¿“independiente de que”? se vienen dando. Sin más, saludo a todos.
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De José Luis Arce (Córdoba, Argentina) para Pablo Gonzalez Ellenberger: ¿Re-tipificar lo independiente?
Mirá, busco primero puntos en común, para que veas que no soy tan negativo, ni de derecha. Respecto a la revolución, ya se sabe, 'la revolución es un sueño eterno', aunque algo más que sanas intenciones ¿no? ¿Anticapitalismo?, también, a ultranza. Tus generosos deseos, también, me parecen compartibles, aún cuando los manifestás como un acto de fe, que en tanto tal, no necesita ser objetivo. Después de ahí, veamos... Las condiciones ético-disciplinarias del buen revolucionario al que manifestás tu adhesión, no son muy distintas del de otras épocas y espacios y en eso sí difiero más; quizá haya razones generacionales y por eso te decía de considerar nuestras respectivas experiencias, no por una cuestión de chapa sino de credibilidad por lo que se expresa. No creo que te opongas a testimoniar con una obra concreta la concordancia entre lectura y acción. Uno no será un banco, pero acredita experiencias, ya que no propiedad privada. Soy un Wall-Street de lo intangible. Mi primer trabajo en el TIC, en el 79, fue una dramaturgia alrededor de la crisis de conciencia de dos guerrilleros, resueltos en los personajes de Caín y Abel, que las magníficas críticas colaboraron a crear como un lenguaje alternativo que hoy puedo calificar de resistencia. La obra, ante el stress que le provocaba a uno de los actores, que se sentía señalado, máxime con un Unimog en la puerta, luego de 50 funciones, bajó por autocensura. Mi último trabajo, hoy en el 2006, que estreno en noviembre en el Comedia, es un trabajo experimental que se llama 'Amurados' sobre testimonios de supervivencia de presos políticos argentinos. En el medio 'Telarañas' (la obra cumbre de ese grupo), 'Jeremías' (la primera obra argentina que trata el caso de los niños apropiados. Ver La Voz del Interior del 27 de mayo del 2002), y muchas otras, que aunque adscribían a una ideología, no lo hacían a una línea partidaria específica, dado que el grupo se conformaba por distintas tendencias. Era en todo caso un proyecto de reflexión política, conscientes que con una obra de teatro no íbamos a hacer la revolución. A mi modo de ver, las condiciones han cambiado en tanto hoy me parece improbable apelar a re-totalizar la realidad, como la teoría y la estrategia alrededor de ella. Y en esto Pablo, aclarando previamente que no uso los conceptos como insultos, sino técnicamente, me parece que tu visión peca de voluntarismo. No es por desencanto que lo veo así. La revolución no deja a Stalin de lado con nuevos buenos deseos. Pierre Bourdieu aboga por la devolución de la complejidad que los discursos simplificantes hicieron de los problemas. La despriorización en la Historia de algo como la Revolución, merece una lectura compleja que incluye una autocrítica seria de la izquierda, que en nuestro país no se ha dado. Vos planteás la revolución con gente que no se pase al otro bando. Digamos que no todos/as se pasaron al otro lado; a otros/as los/as mataron. Y tales izquierdistas cuyo 'realismo' los lleva a aggiornarse de mil formas distintas, son cómplices que colaboraron a la banalización política que habilitó la entrada del 'todo vale' posmoderno. Así, las categorías 'reforma-revolución' se sostienen sólo si mitificamos un poco, esto es, contradiciendo la ética que les dio fundamento y credibilidad teórica. Y lo que decía de evitar la fanfarronada de rugir la revolución con discursos duros, pero sin dar cuenta de todas las liviandades del trasfondo, sólo da la posibilidad de enamorarse románticamente de ella, por el camino de una férrea aunque ingenua eticidad. Prescindo del asunto que el autor Heriberto Boeder plantea, sobre si por totalizante deviene también totali-taria. Algunos pensadores marxistas se resisten a conceder el marco de la totalidad a una fragmentariedad que da por superados los grandes relatos sobre los que se asienta la teoría revolucionaria del marxismo. No es una ocurrencia mía que esas condiciones piden otra cosa de la teoría, donde el propio concepto de 'revolución', como lo concibió Marx, se presta no a revisiones sino a nuevas lecturas (Ver 'A propósito de Lenin', Zizek, 'Nuevas reflexiones sobre la revolución de nuestro tiempo', Laclau). Algunos de estos teóricos disparan a un 'post-marxismo', que lleva a los totalizantes a poner el grito en el cielo, y a lanzar acusaciones de reaccionarismo a troche y moche. Si la revolución es un sueño eterno, no creo que esto cobre legitimidad por el auto-engaño, ya que por esa vía sólo se seguiría cayendo en un mero izquierdismo como enfermedad infantil (como una bilirrubina idiotizante). Por ahora importa constatar que ese territorio de discusión, aunque no unificado, está planteado. Personalmente pienso que en un marco de derrumbe de la ideología totalizante, es ultra-imprescindible hablar de pluralidad, que el discurso duro evita por dogmatismo y obtusidad. Un militante trotsko (bastante desengañado) me contó un chiste, devenido de una reunión de agrupaciones políticas de izquierda. Según iban llegando a la reunión, cada recién llegado se sentaba a la izquierda de los otros (había que cuidar la imagen). Así, hasta que cuando llegó el último, se había hecho una hilera tan extensa, que quedó fuera del contexto de la reunión y de lo que allí se hablaba; pese a eso, nadie podría sacarle la complacencia de haber salvado su 'izquierdismo', que era lo importante. Es más dable ver que la cultura de izquierda, no tanto los partidos del mismo cuño, reflejan esas nuevas condiciones en toda esa imaginería y re-lectura que ha tomado los visos de una heterodoxia, que también ha desatado gastritis en los partidarios de la vieja ortodoxia, donde podrá entenderse que algo como la Revolución, adscribe a conceptualizaciones diversas evidentemente. Un ejemplo de esto se da en Eduardo Grüner versus Ernesto Laclau, donde no es difícil ver que los viejos padres teóricos, no podrán ser releídos sin caer bajo acusación de herejía. Esto de ponerse siempre a la izquierda del otro, podría explicar cómo se sobresaturan situaciones de la realidad, como la que se dio en las Asambleas post-2001. Sólo pensar en un pacto de clases posible, encendió la luz roja; debía entenderse como una proletarización de hecho o nada. El discurso colapsó los espontaneísmos: los de la clase media cacerolera y los de la dirigencia de izquierda sin aparato conceptual y estratégico preparado. La Historia se los comió a ambos. Para no perder el objetivo relativo al teatro, hay que decir que las condiciones que otrora permitieron organizaciones teatrales de carácter social, mutual, sindical, gestionario, solidario, se han venido abajo (Actores, Coordinadora en Cordoba). Esta última sobrevive con los medios que le provee la Revista 'El Apuntador'. Qué va a hacer, la lucha también pasa por la pluma y la palabra, y ésta (la lucha), para mí como teatrero, no necesita irse a un campo extra-teatral. ¿Acaso el arte no es revolucionario? Respecto a mi crítica al consignismo revolucionarista, es objetivo, y se refiere a que es un signo de violencia simbólica, paternalista, conformista, ilusorio, y para nada cercano a un verdadero proceso de conciencia. Además, es obsceno ver al lenguaje como poder, reclamarse abiertamente como tal antes que como comunicación. Bourdieu llama a no sobrestimar los procesos de conciencia (Ver su Entrevista con otro prominente pensador de la izquierda como Terry Eagleton en el libro 'Ideología', compilado por Zizek). El sociólogo francés también manifiesta vehementemente que a través del capital cultural (luego imperialismo simbólico) se trafican luego unanimidades. Y en esto no hay distingos de izquierda o derecha cuando es un juego de poder. Acá es interesante plantear la figura del independiente y siguiendo a Bourdieu, en tanto independiente de los poderes, crítico de los tópicos, destructor de las alternativas simplistas, restañador de la complejidad de los problemas, proyectista colectivo y solidario, pensador crítico, reserva del espíritu de investigación y verdad. Ahora, lo independiente puede ser reaccionario, si ante la precarización de las condiciones económicas, aparece como justificación de lo que no puede hacerse, justamente porque se es independiente y tal condición como indisponibilidad para entrar en un Plan de Cultura General. Con lo cual, esa precarización se ejerce como dominio. Y ante esa violencia estructural, no queda otra que funcionar con miedo, pues ante el riesgo de perder las migajas, el empleo, se genera olvido del otro, traiciones, despolitización, desmovilización. Y cuando hay culpas, hay que des-eslabonar las cadenas, separar. De esa manera (en el teatro de Córdoba es bien evidente) no se respeta a maestros, ni a la riqueza de hecho, espontánea, a-sistemática, que no responde al neo-yuppismo cultural de los licenciados (como si para ser artista hubiese que ser tal cosa). La des-legitimación de los saberes alternativos, activos, tradicionales, produce una dilapidación de formidables energías sociales acumuladas en el sentimiento patrimonial de las personas y pueblos, que muchas culpas políticas obligaron a canalizar como desecho a los desagües culturales. La diversidad quedó eliminada técnica y criminalmente por las concepciones unanimizantes, que sólo concibieron a la cultura y creatividad popular como un botín a manipular, o a hacer de ella un usufructo compasivo y paternalizante. Por eso, me opongo a terrorismos terminológicos totalizantes y que sólo pueden funcionar a través de celebraciones unánimes, asediando a los disensos ultra-necesarios. Ej.: Si hay un cantante popular (lo hay) que es portavoz de un pensamiento crítico, y voy a su concierto, no es para celebrarlo unánimemente, sino para criticarlo también. Esta autonomía, la reivindico como independencia. Y el pensar por mí mismo es un aspecto que Marx contemplaba en el comunismo realizado y que la Escuela de Budapest, a través de Agnes Heller (discípula de Lukacs), valoró como nada extraña a la idea liberal de libertad de John Stuart Mill. Hay que asumir que esto, en la izquierda, fue todo un terrorismo teórico. Termino, Bourdieu dice que en la propia izquierda, máxime en la izquierda iluminada, se desprecia al trabajador o se lo admira demasiado, lo que también es una forma de desprecio. Las nuevas ciencias cognitivas, sociales, psicológicas, abrieron territorios a nuevos emplazamientos teóricos e interpretativos y que tienen un formidable escenario también en el Arte para manifestarse. De esta manera, la obviedad política dirigista deberá dejarse de plantear deliberadamente como inconducencia (que es el efecto de las consignas políticamente correctas, pero delirantes en el contexto). Sino, la desafiante fórmula sesentayochista sea realista, pida lo imposible', se transforma en sea realista, pida aquello que imposibilite la toma real del poder'. Otro cambio de condiciones es la llamada crisis de la representación que también alcanza a la ideología en tanto sistema de representaciones. Pero sobre ella, la crisis de la representación, he escrito bastante en el Foro como para seguir emplomando.
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Foro Celcit 741 – martes 5 de setiembre de 2006
De Marcelo Eschoyez (Villa Ballester, Buenos Aires, Argentina): ¿Retipificar lo independiente?
Independiente es un fenómeno que siempre incluye: una forma de aprehender el mundo según lo que de el nos representemos, podríamos decir el discernimiento o bien amplitud de visión; También incluye la capacidad y la voluntad para actuar. Este juicio y su actuar está atravesado por "lo legal"" lo ético" y" lo moral", todo esto a su vez es un conjunto de conceptos dinámicos que se establece por la interrelación de lo que nos representamos del mundo los distintos grupos humanos (y a su vez cada grupo también tiene su propio subconjunto de normas). Las fronteras que delimitan a uno u otro grupo son borrosas y dinámicas a lo que debe agregarse que generalmente uno vive en varios grupos simultáneamente. La propia evolución (en un sentido u otro) determinará nuestra independencia al actuar, tendrá en nosotros y sobre los otros una consecuencia; Así agregamos el concepto de responsabilidad de actuar en forma independiente. Tal vez convenga hablar de la responsabilidad que tienen aquellos que se desarrollan como artistas independientes. Permítanme ampliar con unos fragmentos de una ponencia de Liliana Tasso presentada en una jornada organizadas por el IUNA
El artista independiente (¿no oficial?) hoy en la argentina
¿Quién es el “artista”?
Una persona que produce y desarrolla una actividad artística con expectativa de lograr algún tipo de intercambio social .
¿Qué es la actividad artística?
La actividad artística se inscribe dentro de las funciones simbólicas específicamente humanas.
Al igual que el lenguaje el arte presenta una doble cara. Es producto del hombre y a la vez la constituye como tal volviéndose imprescindible en su permanente evolución cultural.
Múltiples capacidades humanas como el pensamiento, la memoria, la inteligencia, la habilidad motriz, la emocionalidad, la espiritualidad, la imaginación, se ponen en uso en las diversas actividades cotidianas, pero es en el arte donde todas se integran, se fusionan y se unifican y por lo tanto se potencian en una expresión completa.
Esta forma particular de percibir la realidad, expresarla y reconstruirla a través de esa expresión implica poner en uso de manera intuitiva mecanismos cognitivos integrados. Esta habilidad que los artistas vienen desarrollando desde los principios mismos de la humanidad se asemeja mucho a los modelos que los nuevos científicos están hoy proponiendo sobre las formas más apropiadas para percibir y operar sobre la realidad tanto en las esferas científicas como cotidianas.
Lo artístico por lo tanto sintetiza y resignifica “lo humano” y “lo humano” incluye como condición necesaria “lo social”
El hombre es un ser social, la individualidad se construye y tiene sentido dentro de una trama de intercambios e identificaciones. La individualidad aislada e independiente como solemos imaginarla es una ficción muy enfatizada por una parte de nuestra cultura y ese énfasis tiene estratégicos fines ideológicos asociados a la manipulación, la confusión y el consumo compulsivo.
¿Qué es ser artista dentro de un entramado social?
Ser artista es entre otras cosas sostener ese lugar social en donde emerge gran parte de la energía creativa y expresiva de un grupo humano en un espacio tiempo específico. Cuando esa energía fluye hacia la expresión se hace visible, vuelve sobre el grupo, se resignifica y modela la cotidianeidad social.
Siguiendo esta idea llegamos a una afirmación: El arte construye realidad, y como la realidad es solo una ficción creada y consensuada por todo el grupo, es fácilmente modificada a través de la transformación de las representaciones simbólicas grupales.............,,............
Retomando y redondeando: todos estamos atravesados por paradigmas (sean orientales, occidentales, u otros) y sobre estos también influimos, sólo resta ver en donde se para cada uno y cual es el propio deseo de evolución y en consecuencia de apertura al análisis honesto de otras posiciones para modificar el propio posicionamiento.
Aspecto práctico: En el año 2005 participé con un proyecto de los que se clasifican como arte y desarrollo social, seleccionado en la feria del desarrollo organizada por el Banco Mundial. Me encontré por la instancia en la que estaba con muy buenos proyectos de otras organizaciones (debido a que todos pasamos por una instancia de calificación por expertos) También me encontré en la situación de que debería competir contra los otros en un certamen final que respondía a la ideología Darwiniana que sólo superaría la mitad, esa mitad que tendría las glorias y la financiación, compartiendo el agasajo final en una mesa “la de los seleccionados”, y la otra mitad en otro restaurante, el de la mesa de “los no seleccionados”, que deberían “aprender a superarse”. Yo, dos argentinos un paraguayo y un chileno dijimos participar así no y comenzamos (como motores principales) una campaña para generar una contra propuesta y no quedarnos solamente en una posición de crítica. Fueron tres días de trabajo intenso en los que recibimos la adhesión de la mayoría de los participantes (en contraposición a todo un contexto preparado en su mayor parte para apoyar la ideología darwiniana). La contrapropuesta contenía puntos que de existir la voluntad política eran fácilmente realizables, en general proponía un trabajo integrado que nos potenciara a todos los actores sociales involucrados (defendiendo así un paradigma de desarrollo social y ecológico integrado). El resultado en mi opinión fue satisfactorio: muchos jóvenes rechazaron la ideología darwiniana en el marco planteado por los organizadores y algunos se animaron a hacerlo público sobre el escenario cuando les tocó hablar. Varias organizaciones que ganaron la financiación continuaron apoyando el punto de disminuir su propia financiación para que los fondos abarquen la totalidad de los proyectos (esto no fue posibilitado). Se expresaron las razones que impulsaban nuestra propuesta integrada a los organizadores y funcionarios, algunos “escucharon y reflexionaron” otros no pero lo que sí era seguro en su actuar NO ERAN INDEPENDIENTES.
Y....................También conseguimos un premio consuelo para todos los perdedores: “Una computadora para aprender a superarnos”
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De Alejandro Robino (Buenos Aires, Argentina) para Jorge Salinas: Vaivén
Estimado Sr. Salinas: Contesto a través del foro el mail que me a enviado, pues me parece oportuno que estas aclaraciones queden hechas en el ámbito que las vio nacer, ya que algún otro foreuta pudiera compartir sus inquietudes. Con el fin de no traicionar sus pensamientos, es que transcribo sus palabras:
"Muchas gracias sr. Robino por contestarme en el foro del Celcit.
Mi inquietud surgió por cuatro razones que no me puedo explicar:
La primera era referente a una agresividad expresa entre vosotros, aunque si es cierto que el otro sr. (¿Arce?) era el excesivamente agresivo, para una discusión en un foro abierto a gente como yo, que no estamos enterados de los acontecimientos que suceden en Córdoba o con los organismos que otorgan las subvenciones. Me daba a entender que existe una rivalidad o enemistad anterior, pero que no entendía y que no me interesa porque es particular de vosotros.
La segunda, se debe a la invitación que se hizo a los participantes en el foro, para que opinaran, aclarando que sería difícil extrapolar lo que sucedía en Córdoba con lo que sucedía en otras partes. Pero noté que ni a la sra. de Salta ni a los sres. de San Pablo y La Paz se los tomaba en cuenta ni se opinaba sobre la problemática que ellos planteaban. Por lo que me intrigó desde dónde del teatro hablaban. Porque como ud. bien sabrá, los colores varían, según los amaneceres. Perdóneme por no conocer su trayectoria, ni siquiera he leído alguna de sus obras a pesar que pertenecemos casi a la misma generación, tengo cincuenta y seis años y soy argentino.
La tercera, era esa obsesión por demostrar que se opinaba desde un punto de vista “¿moderno?” “¿progresista?”. Si lo soy, que tengo que demostrar nada, si no lo soy que tengo que demostrar nada. “¿Qué es moderno?”- ¿Cuántas disquisiciones podríamos hacer?
La cuarta, fue lo conciso de sus dos respuestas.
No creo que sea su ánimo considerar tal cuestionamiento exclusivamente hacia sus coterráneos, porque sino, no lo hubiera planteado en el foro, me parecía que lo que quería era “¿denunciar?”, pero en algún momento me pareció, al responderme escuetamente, que le molestaba que uno se metiera y opinara. No es que piense que mis opiniones son importantes, todo lo contrario, llevo conmigo toda la carga de un hombre de teatro, pero al leer sus cultas palabras, su manera de tratar el problema y todos los otros temas, en los que ud. ha opinado, me hacían dudar sobre la amplitud de aceptar otras ideas y en mi idealismo hacia la gente de teatro, no podía creer, que le molestara una opinión de fuera, del “ex conquistador”, comparta una sonrisa conmigo, ante ésta expresión, por favor.
Parecía, que el montar un espectáculo en Córdoba era sencillo y que todo iba a cien por segundo. ¿Qué hace éste sr. me pregunté? Si montar un espectáculo, en cualquier parte del mundo es dificilísimo, que no levante la perdiz porque nos vamos todos para allí.
Porque lamentablemente, no hay lugar para tanta gente que necesita expresarse, si bien es cierto, que no todos convierten con acierto "los gestos teatrales de la vida en gestos teatrales artísticos".
Y puedo concluir diciendo que mantenerlo en cartel es aún más difícil.
Perdóneme, que ocupe su tiempo con éstas tonterías, no sé si leí mal, lo que no estaba escrito, pero sentí dolor.
Desde ya, estoy muy agradecido por haber leído éste mensaje. Un abrazo. Jorge Salinas."
No ha sido mi intención, ser desconsiderado para con sus opiniones. Lo Escueto de mis mensajes se debió a la escasez de tiempo, la coincidencia en algunas de sus afirmaciones y el afán de abastecer sus inquietudes. Lamento que mis palabras en el foro hayan connotado algún tipo de agresividad. Respecto del Sr. Arce, creo que por motivos que desconozco, optó por el camino de la calificación de las opiniones. Esta opción aborta el diálogo. Se debe convivir en la disidencia, pero no en el plano de la violencia verbal. No tengo ninguna animadversión ni apriori ni aposteriori con el Sr.Arce, con quien solo tomé contacto a través del foro. Respecto a la localía de mis pareceres, hice epicentro en Córdoba, pues sobre una problemática suscitada en esa geografía se originó el diálogo y oportunamente pregunté si sobre esa cuestión se tenía intención verdadera de discutir. Es mi profunda convicción, que la queja sin protesta y propuesta dentro del círculo de nuestras relaciones e intereses cotidianos, en los que nuestro decir y hacer implique riesgos personales verdaderos, no es más que una catarsis infructuosa. En cuanto a la competencia que usted dice percibir sobre quien es más moderno o progresista, sinceramente, en lo que a mis opiniones respecta, me tienen sin cuidado. Las etiquetas, suelen ser caballos de Troya.
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Foro Celcit -11 setiembre 2006
De Jorge Salinas (Barcelona, España) para José Luis Arce: Vaivén
- Hola, no voy a discutir sobre “la modernidad de las formas”, a mi “che varón” me huele a naftalina, a una época que me resulta “casposa”, etimológicamente la llevaría a reminiscencias monárquicas escritas de distinta manera para remarcar las clases, creo que sólo son costumbres culturales que tienen su significado y que a veces es importante leer. No creo que seamos mejores ni peores.
¿Qué tal si nos llamamos de “Vos” o de “Tú” y nos dejamos de joder.
- Vale, acepto piraña, como animal de compañía. Vuestra discusión es algo que no sé, es otra historia, probablemente llena de malentendidos, pasión y vacío, el sr. Robino tiene su manera de proceder y pensar que no discuto, no aprecio por éste medio, como a veces hago humor, soy serio y parco, miro a los ojos, trabajo bastante, pese que aquí estamos de vacaciones hasta el próximo mes, no tengo mucho tiempo, y no creo que valga la pena “gastar pólvora en chimangos” (chán-chán).
Pero el ser parco no significa ni mucho menos, ser serio.
- Estoy totalmente de acuerdo contigo de lo que piensas del funcionario, un provocador, tiene sus ideas y aunque yo no las comparta, me parece bien que la gente tenga ideas, así se con quien hablo, evidentemente éste sr. o quien esté detrás de él, no comparte las de uds.
Creo que no le servían para sus intereses y que el rencor partidista o clasista más que el político hizo o hace, que por “increíble que sea tu proyecto”. “Elaborado minuciosa-mente”. “Artísticamente perfecto”. “Coherente”. “Con un aporte de trabajo de media provincia” y todas las virtudes del libro de misa, no prospere.
- Supongo que “sospechaban” que vuestro análisis psicosocial, no coincidía con el de ellos.
- Creo que la cultura debe recibir ayudas por parte del estado, es parte esencial en la estrategia para el desarrollo y el crecimiento. Pero, ¿Quién es el valiente que teniendo poder de decisión acepta los conceptos artísticos y políticos de los que no piensan como él y les da medios para que los desarrollen?
Si gestionas un espacio, tú, programas a través de tus ideas y sensaciones y estas no te dejan ser independiente. Cuántas veces un concepto puede desanimar, una opinión, un…si es así a mi no me interesa…. ¿Suponte que cambie el dueño de la sortija?
Uno es “algo” producto de lo que ya sabemos…. ¿Hasta donde llega lo ácrata en nuestro pensamiento?
Creo que cuando debes sacarte la sortija porque si no “No hay próxima vuelta” debes estudiar las contradicciones de la mano.….
-No estoy de acuerdo con “No había teatro independiente en Argentina como el de Córdoba de los 80”. Me parece una apreciación incorrecta. Sin maldad, pero soberbia ¿como podemos medir la dimensión de lo que sucede en un movimiento como “el independiente” en un país tan grande y diverso como la Argentina, en una corriente con mas de cincuenta años, no sé la edad que tienes pero hasta que el fenómeno de Internet se expandió, los grupos trabajaban de una manera “independiente” incluso hoy, tan modernos que vamos, conocemos poco, los unos de los otros. (Rétate a ti mismo, pero no me digas nada) Comencé en un grupo independiente y si mal no recuerdo Onganía corría detrás de nosotros con la “porra” en la mano. Era un pibe. De la gestión dentro de éste pensamiento puedo ponerte de ejemplo “Nuevo Teatro” de Alejandra Boero, que si no me equivoco (de esto Alejandro lo podrá confirmar) es un modelo de gestión que fue llevando a través de los años supongo que adaptándolo a los tiempos y a las circunstancias.
Escribí demasiado, no sé si quedó claro mi pensamiento, pero quería comentarte lo que viene a continuación.
Aquí, hace dos días, a Pepe Rubianes y a su compañía, se los amenazó, para que no estrenaran un espectáculo en un teatro municipal de Madrid (gobernada por la cara mas cordial de la derecha) basado en la obra de Lorca (Lorca somos todos – una temporada en Barcelona), se amenazó a la secretaria de cultura del ayuntamiento, al director del teatro y a toda la compañía, y el ayuntamiento no tuvo la capacidad de reacción para impedir que los energúmenos se salieran con la suya, y ahora Pepe está buscando una sala privada. Esto se llama censura… suciamente escondida y manipulada,
La derecha (aquí en España no hay partido de extrema derecha como en Francia, que está Le Pen, aquí está integrada al Partido Popular y en muchos puestos de decisión y la iglesia de Roma no quiere perder influencia y mucho mas). Todo comenzó en Enero, con unos exabruptos de Rubianes, (hacia España y la manera de opinar de algunos sobre los catalanes y lo que sucede en Calunya) de los que luego se arrepintió y pidió disculpas. Yo creo que se pasó, dos estaciones, pero la libertad no debe ser coartada y la libertad de expresión menos. Pero había que escuchar todas las mentiras que se decían de aquí y era difícil no ofuscarse, porque yo soy un castellano parlante y nunca fui discriminado por esa razón. Un abrazo.
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Foro Celcit Nº 749 – 13 de setiembre de 2006 www.celcit.org.ar - correo@celcit.org.ar
De Nelson Gonzalez (Montevideo, Uruguay): Contacto
Hola: Mi nombre es Nelson González y vivo en Montevideo Uruguay. Les cuento que soy actor, director y dramaturgo, tarea que este año me capta toda la atención y energía. Es un placer para mi ingresar en este foro, herramienta que no suelo usar, pero esta vez me anime. Espero que valga la pena. Siempre trato de apostar a las herramientas de comunicación que estimu-len el estar juntos por algo. En este caso el teatro. Les cuento que como teatrista hace años que vengo trabajando en la escena montevideana. El medio teatral montevideano es un poco extraño y la falta de políticas culturales de fondo hacen que los teatristas independientes estemos por momentos tan solos como segregados. Y como yo hay un montón. Por eso se nos hace imperativa la comunicación con otras organizaciones como ustedes que han sabido de alguna manera vincular lo artístico con lo institucional. En materia de trabajo me encuentro en un momento extraño en mi carrera donde abandone los diarios ensayos como actor, los insomnios de director para dedicarme por lo menos este año por entero a la dramaturgia. En ese sentido vengo produciendo obras desde el 2003 y veo que se me ha acumulado un mate-rial impresionante ( por lo menos en su volumen) de obras que aun están sin estrenar o inclu-so sin corregir. Una vez intente escribir para informarme de como había que hacer para publi-car en su biblioteca y no obtuve respuesta. Espero que por este medio logre por lo menos un no. Por lo demás, cualquier artista que ande por ahí con ganas de intercambiar ideas, concep-tos, experiencias sobre la escena estaré aquí esperando gracias
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De Cristian Krämer (Buenos Aires, Argentina) para Joel Alvarez: Reflexiones
Muy linda tu nota. Es absolutamente veraz tu comentario y muy cálido. Lo que NO me llamó la atención en absoluto, es lo que decís sobre un lugar sin crisis y sin teatro. Notablemente (y es un hecho fáctico), el expresionismo artístico, florece con las crisis. Como si fuese una bús-queda de salidas hacia otros lugares. Gente que se ha hartado de ir y venir entre las eternas dudas que generan las inestabilidades laborales, y que (indagándose en la profundidad), deci-den que es mejor hacer lo que uno siente aunque con poca paga, que hacer lo que uno no quiere y con dudas económicas, ha conformado esta especie de explosión artística en Ámérica latina. Creo que es así. También hay que contabilizar la mano que da la educación de los pue-blos. Creo que sería mayor con más y mejor educación. Pero eso es un problema histórico mundial. Un abrazo y estemos en contacto.
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Foro Celcit 765– 29/9/06
De Carlos Ianni (Moderador): Reconocimiento
Por Ley Nº 2064/2006 se ha declarado Patrimonio Cultural la actividad del teatro independiente, de acuerdo con la Ley Nº 1227, que en el inciso j) del artículo 4º, se refiere a "Expresiones y Manifestaciones Intangibles: de la cultura ciudadana, que están conformadas por las tradiciones, las costumbres y los hábitos de la comunidad, así como espacios o formas de expresión de la cultura popular y tradicional de valor histórico, artístico, antropológico y lingüístico, vigentes y/o en riesgo de desaparición."
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Perdón, de qué están hablando? Luis Paredes – (peruteatro) 18/12/2006
Chrstian Teresa rodriguez franco
Mucha Fuerza Daisy, y espero te conviertas en una buena critica, porque de verdad lo necesitamos.
De mi parte dejo abierta Tu finalización.
daisy sanchez
Dialogo? La impresion que tengo es que buscas la provocacion para despacharte con tus panfletos sin capacidad de entender la posicion de los otros. Una lastima, los artistas debemos estar abiertos a la comunicacion que no se cierra en mi posicion. La lectura de un espectaculo, como la entiendo yo, no empieza en el espectaculo sino en las estructuras estetico mentales que tiene el individuo a priori y que se manifiestan al exponerse sensiblemente al fenomeno artistico. Y justificar la situacion porque otros esten bien; es muy facil; es mejor proponer proyectos interesantes para desterrar los mitos que se crea en la mediocridad.
DE mi parte doy por finalizado el pseudo - dialogo
Daisy Sanchez Bravo
Chrstian Teresa rodriguez franco
Creo que terminar el año con una reflexión sobre la crítica , uno de los ejes temáticos, de la labor teatral en el Perú es importante, me reafirmo en mi propuesta de la Diacrítica: critica abierta dialógica, basada más en una semiótica de la percepción que no exige, especialización critica, y que discute sus propias opiniones constantemente, dándole el valor a la obra no por ella misma sino por lo que esta produce, provoca, cuestiona o refiere.
Y aquí varios puntos me da mucha pena que Ernesto Raez no publique sus comenta-rios, en Peruteatro, en el Biotejido-Contramuestra tenemos el honor de tenerlo y a mi no me queda màs que referirme a sus escritos, y el aun sostiene, como lo hace Daisy que la obra tiene valor por si misma, como si hubiera una justicia critica, o de pronto otorgarle el papel a la historia para que ella de el verdadero valor a una acción tan efímera como el teatro , que la historia exenta de los medios que tenemos ahora nisiquiera a podido registrar.(ya sabemos quien escribe la historia no?)
Y otra vez mi palabrita, basta de tal ingenuidad, los proceso de valor de una obra, dependen de los interese de poder que manejan una sociedad, por lo tanto el artista, debe preocuparse del sentido de su obra y participar en el juego diacrítico, para no permitir que se neutralice o aun se invisilise la obra.
Esta estrategia de invisilizaciòn es la que hace el poder, concretamente la Católica o el Teatro de larco Mar, el Británico, El ICPNA, al tener la capacidad de una maquina mediática propagandística y basar su gestión en una política de mercado, hacen desaparecer cualquier tipo de propuesta que en general son mucho màs interesantes que las obras representadas para este circuito consumidor-conservador.
Por esto son tan necesarios espacios como la muestra(la cual no cumple su rol y debe ser reemplazada) o festivales y puntos de encuentro, donde se pueda hacer un trabajo crítico y un dialogo, creador-espectador, felizmente la Internet también nos permite hacer este dialogo, y hay que aprovecharlo.
Pero hay una cosa en los escritos de Ernesto, su deslinde con el concepto critico exigiendo de la critica una especialización, un certero conocimiento y una cosa que sí que comparto la necesidad de una historia.
Y es aquí donde deben apuntar los críticos e investigadores y aun los teatristas, a construir, una historia del teatro contemporáneo peruano, y de hecho a manejar la historia del teatro Europea, Norteamérica, latinoamericano y de otras latitudes.
Esta debería ser la misión de una asociación de críticos como creo ahora se esta haciendo, sin historia es cierto no se puede hablar de tendencias y ni siquiera señalar procesos, y claro se vendrán con la cháchara de la falta de presupuesto y màs, pero ya ni publicar es necesario hasta un blog en el que se vaya contribuyendo serviría.
Que puedo decir de la critica actual, la cual esta reducida apuntes, nada solo seguir expresando mi preocupación, revisando estos apuntes, como la critica de Tartufo de Luis Paredes no puedo más que enojarme, yo siento que escribo muy mal, pero el problema es aun mayor cuando no hay ni labor interpretativa..
Y dejando abierta la conversación acabo con esta pregunta ¿cuales son los criterios que usa su crítica(comentarios, apuntes, diacríticas, etc) para dar un juicio de valor a la obra?, porque lo que si me es claro que todos si que dan un juicio de valor, pero con que criterios que a veces parecen la felicitación de un amigo a otro en un cumpleaños.
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Daisy Sanchez Bravo
Foro Celcit: 26/2/200________________________________________
De Clodet (Mar del Plata, Argentina): Salas que cierran
Me sumo a las expresiones de preocupación por este tema. Preocupación y alarma. Las características de las salas en riesgo pueden variar de caso en caso y de lugar en lugar, pero el tema inmobiliario con sus costos y sus exigencias y la imposibilidad de sostener espacios es una constante. Es más: lo sufrimos también los grupos que no deseamos tener sala pero que nos resulta indispensable contar con un estudio, un galpón, un saloncito para investigar y ensayar y seguir vivos. No es mi intención equiparar este problema al de las salas que vienen sosteniendo su actividad, pero el problema es amplio. Teatro es espacio y los espacios están sobrevaluados y escasean.
Insisto con algo que debo haber dicho aquí una docena de veces, debería legislarse sobre las propiedades del estado ociosas. Hay galpones, casas enormes y edificios vacíos, muertos de risa. Y son nuestros... pero no los podemos usar aunque trabajemos por y para la cultura.
Aquí, en nuestra ciudad, se ha fundado un centro cultural en una sede del ANSES (organismo del estado) que estuvo vacía, sucia y saqueada durante 9 años. Nadie le dio al grupo de audaces el permiso para hacerlo, o en todo caso, se lo dieron a sí mismos. Hoy es el centro cultural América libre, está limpio y hermoso y tiene actividad cultural todos los días de la semana. Hay utopía y desafío en la movida. Muchos apoyamos abiertamente la ocupación, otros se escandalizan y otros condenan. Lo que no se puede negar es que despierta debate desde la acción y que un edificio de tres pisos mugriento y vacío hoy está lleno de vida, de arte y cultura.
No estoy proponiendo que cada sala en riesgo “ocupe”, pero traigo el ejemplo para sumar al debate. En muchísimo casos la necesidad es un subsidio, en otros, legislación que facilite la actividad moderando impuestos y exigencias. Y también tengo la certeza de que varios sabríamos sacarle enorme provecho a esos espacios nuestros que están ahí, esperando.
Creo que tenemos que debatir, pensar, reclamar, juntar firmas pero además, o sobre todo, creo que debemos ponerle el cuerpo a la cosa. El grupo de gente que ocupó y le da vida al América libre encontró esa manera de hacerlo. Habrá otras. Imaginemos, que para eso somos artistas.
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De Martín Ortiz (Buenos Aires, Argentina) para Silvina Wolfenzon: Subsidios al teatro
Con poco de buena voluntad, elijo pensar que pecas de ingenua en tu reflexión... Tanto en la salud como en la cultura el Estado cumple, o debira cumplir, un rol importante... Por Ley, el Estado está obligado a cumplir con determinadas cuestiones tanto en relación a la Salud Pública como al Teatro... Buscás un enfrentamiento o un conflicto entre dos ámbitos que ni están enfrentados ni están en conflicto... Te pregunto: ¿el Hospital de Clinicas y la Salud Pública en general, están en semejante situación por el dinero que el Estado destina al Teatro? ¿La gente del teatro debe cederle "su dinero" -que no es suyo sino que corresponde por ley para diversos proyectos- a la Salud? En un país como el nuestro no necesita más dinero la Salud en detrimento del dinero que necesita el Teatro. Más bien, en un país como este, el Estado debe cumplir otorgando a cada uno el dinero que le corresponde e invirtiendo en la actualización y modernización de los servicios que debe brindar. En cuanto a la necesidad de que el teatro viva de sus propios dineros generados por sí mismo... Es el mismo discurso que reclama desde hace tiempo el arancelamiento de la Educación Pública... Y quiero recordarte que esto redundaría en el Arancelamiento de la UBA y, como el Clinicas depende de la UBA, el arancelamiento de todos sus servicios por lo que tu abuela, y tantisimos otros, deberían buscar otros lugares para su atención... En cuanto a quitar los subsidios al teatro -por ejemplo- para comprar tomógrafos, camillas, etc.... Es como decir que dejes de regar los tomates porque hay que regar la lechuga... y se te mueren los tomates. ¿No sería mejor quitar o reducir los subsidios a los trenes por ejemplo? De hecho, para tu conocimiento, eso sería bastante más dinero... ¿No sería mejor que te preguntes por qué se pagaron 9.000 millones de dólares al FMI antes de invertir 150 millones en el Clinicas? Creo que para reflexionar sobre algo, primero hay que tener una mínima información sobre los temas. Me parece que antes de opinar primero hay que reflexionar y deberías informarte más, en principio, sobre los organismos oficiales de apoyo al teatro y qué dinero manejan y qué dinero reciben los artistas y las salas.... Afectuosamente
Carlos Ianni mete la cuchara: Una aclaración, Martín, Silvina, que hace que, además, esta falsa contradicción esté mal planteada: los dineros con los que el INT subsidia a la actividad teatral, ¡no son del Tesoro Nacional (es decir, de los impuestos que pagamos todos nosotros) como sí lo son los que financian la educación, la salud, la seguridad o, como bien dice Martín, subsidian al transporte público (manejados por empresas privadas)! EL INT, al menos en lo que dice la Ley, es un ente autárquico. Sus fondos provienen de porcentajes de publicidad que recibe el COMFER y de Lotería Nacional. Fondos que, conviene recordar, mientras siga vigente la Ley de Emergencia Económica (?), recibirá con cuentagotas (y no todos) del Ministerio de Economía, en vez de poder disponer libremente de ellos. Un cordial saludo.
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De Clodet (Mar del Plata, Argentina): No al cierre de La Máscara
Toda mi solidaridad para los compañeros teatristas de La Máscara. No desfallezcan, pidan ayuda, publiquen un mail donde hacer llegar el apoyo para que facilite las cosas. Que la dificultad no los paralice, hagan todo lo que haga falta para ser escuchados y seguir. Les deseo que tengan la fuerza para mover cielo y tierra si es necesario porque si llegaron hasta acá, es porque vale la pena seguir y no entregarse. Un abrazo enorme.
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De José Luis Arce (Córdoba, Argentina): Borradores para un plan de acción
Hay que abrir un nuevo campo de acción político para romper la sutil coacción, el sutil achanchamiento disfrazado y hasta estetizado con retóricas elusivas y despolitizadas. Hay que definir una agenda independiente que haga a acciones internas y externas. Establecer sobre su discusión, un plan de lucha que encadene los reclamos que están en el tapete a nivel nacional, e incluir en los reclamos, la inclusión de políticas equilibradas por parte de la Secretaría de Cultura de la Nación, que establezca con nitidez los niveles de interlocución claramente reconocidos a nuestras entidades. No permitamos que sigan gobernando con este grado de comodidad, porque en ese caso una porción de la impunidad nos toca a nosotros. El diálogo con el Estado presupone el reconocimiento a que la Ley es el imperativo violento de una sociedad que se defiende a sí misma (Foucault) y en no pocos casos, de sí misma. Es por esto que se incluye la necesidad de un pensamiento crítico y alerta. Es evidente que tenemos una crisis de modelo. Adorno en sus señeros ensayos culturales decía que el arte era el proceso por el cual el individuo se libera exteriorizándose y que el filisteo adora el arte por lo que se puede obtener de él. Nuestra a-criticidad de presuntos hacedores colabora a la crisis de imagen en el marco de una cultura que se legitima por su utilidad. De haber sido los nuestros países verdaderamente libres, no hubiesen sido influidos por el fin de la Guerra Fría que debilitó el fundamento legitimador de la creencia en la libertad artística (asimilable a mundo libre) y con ello el apoyo incondicional a las artes que hasta ese momento eran el indicador de una diferencia con la URSS. Terminado ese borde, ese límite de la disuasión bélica, la cultura se funcionaliza y adecua a los principios finalistas de utilidad. Hay una cultura que se opone a dichos roles asignados y que es de carácter reconstructiva por bregar, por restaurar principios del pensamiento crítico, metodologías de emancipación y liberación que no pasan por meras abrazos icónicos a Chávez o Morales. Si se decide que el arte está más allá del Interés y de los moldes lucrativos, se rompe con la moldura liberal-conservadora. La cultura en tanto lucha política es una forma de sustentar esta idea. Tenemos que exigir la restauración presupuestaria que las leyes de ajuste le impusieron como fusibles primero a la cultura y luego a todo un país, bajo la forma de políticas re-distrisbutivas que llevan ínsito un compromiso de justicia social. Este gobierno ha sido elogiado por muy respetables hombres de la izquierda que destacan su política de derechos humanos. Está bien y la podemos asociar a que dicha política tiene el sentido de un ‘re-aparecer’, la que debe extenderse también como una legalización a los grupos de excluidos donde el Teatro Independiente (TI) siguen constituyendo el sector de los Tontos del Pueblo (Teatro de los Andes dixit). Hay que exigir un Plan Cultural con programas específicos relacionados con dicho proceso de regeneración nacional. Debemos derrocar la idea de TI como un sector adscripto a una condición de la pobreza porque es la misma miserabilidad que luego el discurso del poder le otorga a nuestro teatro, o sea sujetos dignos de compasión arreglables con subsiditos equivalentes a los planes desmovilizantes que cunden. La situación de revolución permanente desde la que emplaza espiritual y materialmente un artista cabal, es reconducida por el sistema a una situación de desocupados perpetuos, donde la exclusión ya no se verifica como cifra del problema social sino que se dictamina desde el prejuicio que justifica y habilita su rechazo. El sistema pretende que sólo sentir tal prejuicio, ya justifica la pertenencia al sector de los ‘vagos y mal entretenidos’ que suponen el TI. Es tan obvio como que los pobres son pobres porque no trabajan. Sino trabajan es porque son vagos Y si son vagos les nace vivir de la ligereza de delinquir. Y si hay delincuencia no hay seguridad. Y si no hay seguridad es porque hay gente que no trabaja. Y si no trabaja es porque es pobre vocacional y de alma. Y si es pobre seguro es delincuente. Final: la seguridad contra los vicios de la Nación. El TI es el teatro de lo que crea inseguridad porque es un teatro de pobres. Pero, como dice el poeta, “pensar es tarea de pobres”. Una minoría que para el poder participa de otros grupos portadores del virus de inmundicia adquirida de la diferencia o la otredad: homosexuales, mujeres, grupos étnicos originarios, jóvenes, pardaje, cabecitas negras, etc). Es decir, el TI es parte de una tara moral, de una impotencia biológica que lo hace desaprensivo a los principios de la utilidad, de una incompetencia espiritual, de una discapacidad técnica, etc. TI es la sigla de ‘teatro independiente’ sin fines de lucro, es decir, del ‘teatro inútil’. Inútiles del mundo uníos.
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De Omar Musa (La Plata, Buenos Aires, Argentina) para Adriana Sosa: Salas y Municipalidad de La Plata
Un abrazo par vos, negra; se que pronto nos veremos para pelear por este tema. A todas/os los compañeros del Foro: Me adhiero al planteo sobre lentitud, burocratización e insensibilidad del I.N.T. Sus respuestas son una verdadera muestra de ineptitud; pero es nuestro, somos nosotros en definitiva quienes debemos tomar el toro por las astas; se que no es facil y ya otras veces se ha discutido. Un abrazo.
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De José Luis Arce (Córdoba, Argentina): Varios
-Doy mi solidaridad con los compañeros chaqueños y ya me manifesté respecto a coordinar una acción nacional cual puede ser para empezar un documento a las autoridades nacionales con el fin de que el tema se instale en los despachos, como así también a la prensa, algo que cada uno de nosotros puede hacer con de su región. La sigamos.
-Querida Beba Basso: escribime por favor la reseña de tu relación con Bonino. Te aseguro que va a caer en las mejores manos. No te olvides que la historia de Jorge como la de tantos artistas destacados, aún no está escrita. Un beso.
-Gracias a Sergio Lobo de Florida. Los griegos cuando se escribía con valentía desde la franqueza, con libertad de espíritu y con el único fin de decir la verdad le llamaban parresía. Gracias por ella.
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De José Luis Arce (Córdoba, Argentina): Lo independiente. Temario Pro-Agenda
-Resignificar lo independiente puede ser re-apropiarse del trabajo que supone, pero reconociendo que éste no está en el marco significativo de ‘tener trabajo’.
-Autonomía o heteronomía cultural, propone provocando Bourdieu. El teatro independiente crea antídotos, programas de lucha, resistencia, alternativa y entre otras cosas se resiste como obra a ser mercancía. La gestión como creación (A. Dávila). La connivencia a-crítica es trabajar de Caballo de Troya de esa heteronomía. Lo independiente es el equivalente a responder con espíritu libre en el pequeño campo de la lucha cotidiana.
-Escucho la palabra Industria Cultural y saco la pistola de mis ínfulas creativas más extremas y libérrimas. Si tengo que ser un hombre íntegro ante Sofovich, lo que menos quiero ser es del tipo honrado sinónimo de inofensivo. El ‘entre’ de lo que condiciona y la necesaria libertad lo ocupa el arte como un símbolo de una síntesis que resuelve tal oposición: El trabajo y el goce, el pensamiento y la diversión. A la vez supera cualitativamente la oposición masa-pueblo; consumidor-público. No mirarse el ombligo, también hay un público independiente (PI). Hay gente detrás de la cuarta pared.
-El Teatro Independiente (TI) da testimonio del deseo de vivir del excluido.
-El TI es una comunidad de sentido auto-construído cuya identidad nos une tácitamente sin un proyecto consensuado. Objetivo: busquemos refrendarlo colectivamente. El colega Pedro Araneda de Chubut dijo una frase que me parece impresionante: “existamos con fuerza”.
-El TI se solventa molecularmente en multitudes de perfiles diferenciales. Es desde allí que se postula una defensa de la cultura, de valores ético-espirituales avasallados o a punto de serlo.
-Los diagnósticos no logran unir en una organización única y representativa, que ocupe el escenario de crisis. No olvidemos que el Estado-Nación fue erosionado hasta hacer a la Argentina un caso testigo dentro de la nueva realidad de la globalización. Una vergüenza neo-liberal, con opción a una auto-estima revolucionaria y renovadora.
-La de-culturización manejada como natural en un proceso de exclusión hace retóricas consignas válidas años anteriores: de unión (el pueblo unido jamás será vencido), de organizaciones digitadas (sólo la organización vence al tiempo), etc. Hoy la calle nos llama con hechos no con consignas.
-El teatro actual no tiene identidad en carácter de organización social. Sólo se lo reconoce por el nombre y el prestigio de individuos. El star system, que sólo puede fijarse piadosamente en ese teatro emancipatorio que no entiende, puede más que un reclamo sindical de actores. El TI no es un teatro de nombres propios, estamos liberados de las trascendencias ilusorias y engañosas de los rubros y esas cosas.
-Las tribus en que hemos devenido puede deberse, entre otras miles de cosas, a efectos generales, pero también a una pervertida aplicación de las Leyes: los representantes y delegados representan al Gobierno ante la Gente y no a la Gente ante el Gobierno.
-La queja harta, pero a veces es buena, sobretodo cuando el Estado no apoya lo que de antemano supone positivo (¿por qué lo hace?... simple, el Estado actuando desencarnadamente, es un estuprador de la inocencia). No obsesionarse, ya que como dice Badiou, lamentarnos es alimentar la pulsión herida.
-Un dato de la disgregación: un trabajador explotado es un privilegiado frente a un ejército de desocupados. Pepe Biondi sabía decir: “qué suerte pa’ la desgracia”.
-Desconfiar de aquel que se refugia en un cargo para sentirse ligado al teatro. A veces la calidad humana es inversamente proporcional al poder que se sueña para tapar la imposibilidad de conseguirla. La audiencia de los compañeros del NEA es un ejemplo.
-TI como autoconstrucción de un nuevo pensamiento. El montaje teatral ya es un símbolo palmario de ese proceso de construcción como construcción de pensamiento.
-Estamos fuera de la toma de decisiones por nuestra orfandad organizativa: hemos dejado tomar a nuestros organismos por ‘listas’: azules y blancas, moradas, marrones, tornasoladas y qué sé yo. Vamos por una democracia directa.
-La capacidad de resistencia está intacta pero no está manifestada. Hay una crisis organizacional que compromete el sentimiento de autonomía que se siente sobre la propia producción por una falta de formación política. Entregarnos al Mercado sin formación política, equivale al ‘relájate y goza’.
-La falta de capacidad y entereza para decidir sobre elementos culturales propios es una cruel enajenación.
-No hay gestión si no hay política cultural. Por lo cual, gestión es la bajada a los pies de esa política, para ser instaurada en un lugar. Es topográfica. Cultura como cultivo en un ‘lugar’, por lo cual también es ‘espacio’. La cultura apenas existe ya es lo anti-ausente. Es decir, así como Moisés es el ‘salvado de las aguas’, la cultura es lo salvado de las tierras del no-ser, del olvido programado. Pero hacer una gigantografía de ese deseo popular rompe las reglas del guerrillerismo burocrático, de élite. Estos son los mismos que le dicen ‘elitista’ a un artista que trabaja para 40 personas y van a los cargos por un amor a las masas que consiste en que jamás se hagan pueblo (Canal Feijóo). Es en realidad afán de neutralizarlo en connivencia con otras reparticiones del Estado, con periodistas amigos, con curadores compinches, con colegas envidiosos, etc, etc.
-Una posibilidad tendente a curar males con más democracia: crear un Ministerio de Cultura Popular con base presupuestaria propia, con planes y programas agendados. Participación protagónica en las reuniones de gabinete y en el diseño general del Estado que se desea. La cultura es una consecuencia de ese deseo, la que es supra-individual ya que apoya a grupos de acción por encima de los intereses particulares o sectoriales. Romper el economicismo que determina que los ministerios que generan plata desdeñen a los que la gastan.
-Es una cuestión de Estado que la cultura gestione hombres/mujeres generos@s, abiertos@s, luminosos@s, dispuestos@s, rigurosos@s. Eagleton dice: “la cultura es una cuestión de auto-superación pero también de autorrealización”.
-El Plan Social le gana a la caridad. El Estado debe atreverse a organizar (léase movilizar) la energía social generada por los planes sociales que hasta ahora usa para desmovilizar. Romper con el plan social como limosna y no como remuneración a un trabajo social. Al neoliberalismo lo pone nervioso que una Cooperativa de vecinos haga sus propias cloacas, desagües, conexiones de agua corriente, de gas natural.
-Los mass-media privados sobreponen su poder abrumador y crean una cultura sanguijuela destinada a afirmar los códigos preceptuales del Capital. Esta sobreposición lleva a muchos a creer que la democracia siempre es falsa. Para ello, el Estado hace creer que la cultura es una fiestita para el espíritu que por lo general se asocia al relax, a la tranquilidad y la diversión. Pero el TI (la cultura independiente) recuerda esa puja. Es una memoria de la preceptiva incumplida. El Estado sin cultura fuerte, apela a presiones de poder crudo (Bertrand Russell): contra productores independientes, contra el periodismo crítico, contra los librepensadores... contra... contra... contra. El Estado canta una lógica, que como en el poema de Brecht no tardará de venir a por vos. Seguirla al pie de la letra es un acto de cinismo útil, de aquí que la cultura verdadera es de oposición porque de lo contrario queda asimilada a esos designios políticos.
-Nuestras oposiciones al gobierno terminan no siéndolo a una política sino a un no-hacer constituido en plan político.
-El TI encadenado a una tradición es el mirón que observa si la cultura que se apoya profundiza o afirma el sistema capitalista.
-Convenios como alternativa a los subsidios sin contralor. El Estado no debe ni puede ser Santa Claus.
-El Estado debe trabajar en equipo. Debe celebrar convenios de responsabilidad mutua con los entes independientes que garantizan capacidad de realización, capacidad para gestar el hecho teatral (condición excluyente, porque los grupos deben entender que el dinero público no se regala).
-La política cultural debe empezar por reconocer las diferencias. Por eso se impone profundizar la democracia. Trabajar para todos y con todos. Me parece que es mejor hablar de políticas y no de una política.
-El TI construye ciudadanía.
-La crisis de la representación en el arte equivale a la de la Política y sus instituciones. ‘Que se vayan todos’ despoja la escena política, la desnuda tanto como una escena de teatro literaliza las acciones al punto que Hamlet mata en serio a Polonio, Claudio, Laertes y demás.
-La Organización Social ya no es vertical, donde la reivindicación pase por la toma del poder sino por el reconocimiento de su identidad conjugada con las acciones estratégicas mancomunadas.
-Lo que no se cumple en política se traduce en incredulidad, anomia y lasitud social.
-Cuando entre el político y la gente se crea una distancia, que se sepa, el vacío sólo lo cubre la movilización.
-El INT es una estructura dada y adecuada para aplicar principios como el ‘presupuesto participativo’ (sugerido por el Foro Social Mundial de Porto Alegre, aunque las experiencias hasta ahora son en provincias y municipios. Desconozco que las haya en la Nación. Desarrollaré esto aparte).
Bueno y por ahora etcétera
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